Su trayectoria como empresario y difusor de la cultura ha sido reconocida a nivel internacional. En Líder Empresarial repasamos un poco de su recorrido…
Plácido Arango Arias nació en Tampico en 1931, hijo de inmigrantes asturianos. Se destacó a lo largo de su vida por la gran labor realizada en su segunda patria, España, donde impulsó la economía de Asturias a través de un sinfín de iniciativas.
Mientras vivía en México, durante el año de 1958, fundó junto a sus hermanos Jerónimo y Manuel una tienda con formato minorista que nombraron Aurrerá, vocablo proveniente del eureska que en español significa adelante.
Tiempo después, creó la cadena de restaurantes Vips, que en 1965 trasladó a España, “su segunda patria”, como a él le gustaba nombrarla. De esta manera, convirtió a Grupo Vips en una de las cadenas multimarca más importantes del sector de la hostelería y el comercio en España.
Plácido estrechó la relación con la tierra de sus padres en 1987, cuando fue nombrado como el segundo presidente de la Fundación Príncipe de Asturias, cargo que mantuvo hasta 1996. Durante casi 10 años, dotó a dicha institución de un patrimonio económico en ascenso del cual había carecido hasta entonces.
Como parte de su labor como promotor de cultura, aportó 1,2 millones de euros a un convenio de la Fundación con el Gobierno regional y con la Real Fundación de Música de Cámara, en el cual 36 componentes de orquesta, algunos acompañados por sus familias, fijaron su residencia en Asturias, lo que marcó una importante distinción de la enseñanza de música en el poblado.
Fue también un importante coleccionista de arte, patrono emérito del Metropolitan Museum of New York y del Museo del Prado, donde -junto con el Museo de Bellas Artes de Asturias- realizó importantes donaciones, con lo que recibiría la Medalla de Oro de Asturias que reconoció su labor en la región; el periódico “La Nueva España” también lo nombraría como “Asturiano del mes” por sus esfuerzos.
La responsabilidad social de sus empresas y la labor filantrópica que hizo a lo largo de su carrera, también lo hicieron merecedor del Premio Enrique Iglesias, que recibió en 2017 en manos del rey Felipe IV, reconociendo su contribución al desarrollo de Iberoamérica. En 2019, recibió en premio Reino de España que condecoraba su trayectoria empresarial.
Este gran hombre sin duda representó una figura de muchísimo valor para la sociedad Asturiana, pues contribuyó de manera excepcional al desarrollo de esa región y sobre todo de su gente.