La nueva variante del coronavirus identificada como  B.1.1.529 y nombrada por la  Organización Mundial de la Salud (OMS) como ómicron ha sido identificada por primera vez en Sudáfrica y se ha advertido que podría conllevar un «mayor riesgo de reinfección» con respecto a otras variantes.

En un comunicado emitido este viernes, la Organización Mundial de la Salud anunció que la primera infección confirmada por B.1.1.529 se notificó el 24 de noviembre en Sudáfrica por lo que propagación ha aumentado considerablemente.

El organismo agregó que esta variante contiene una gran cantidad de mutaciones, algunas de las cuales son preocupantes, pues incluyen un aumento en la transmisibilidad o cambio perjudicial en la epidemiología de COVID-19, cambio en la presentación clínica de la enfermedad y disminución de la eficacia de las medidas sociales y de salud pública.

La Unión Europea ya ha acordado establecer restricciones de emergencia y ha prohibido temporalmente los vuelos procedentes de países del sur de África, incluyendo Sudáfrica, Botsuana, Esuatini, Lesoto, Namibia, Mozambique y Zimbabue durante al menos catorce días.

Otros países fuera de la UE como Reino Unido, Israel y Singapur han adoptado medidas similares. En cuanto a Estados Unidos, se notificó que a partir del próximo lunes se restringirá el ingreso a viajeros provenientes de Sudáfrica y otros siete países del sur del continente africano. Canadá también prohibió la entrada a quienes hayan viajado en los últimos 14 días a alguno de estos países.

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Primeros casos

La decisión de estos países ha coincidido con el primer paciente contagiado con la nueva variante ómicron en Europa, se trata de una mujer vacunada en Bélgica que regresó de un viaje por Egipto con síntomas de coronavirus. Fuera de la Unión Europea, se han detectado también dos casos en Hong Kong y otro en Israel.

Algunos fabricantes de vacunas, cómo Moderna y Johnson & Johnson ya han informado que se encuentran trabajando para probar la efectividad de sus productos contra ómicron. Por su parte  Pfizer y su socio alemán BioNTech explicaron que sus laboratorios están analizando esta variante para determinar si su vacuna podría requerir algún ajuste.

Finalmente, la OMS recordó que las personas deben seguir las medidas sociales y de salud pública comprobadas, como usar máscaras, higiene de manos, distanciamiento físico, mantener una ventilación adecuada de los espacios interiores, evitar espacios abarrotados y vacunarse para prevenir el aumento de la propagación.