Por Xicoténcatl Morales Hurtado, CEO de SELF México
La forma como operan las Normas Oficiales en México generan siempre oportunidades y nichos para atender de forma explícita la necesidad de las organización en diversos rubros y a ciertas profundidades.
En el mercado de la consultoría empresarial se ha vuelto común ver surgir especialistas al por mayor sobre temáticas que nos obligan a verificar su verdadera legitimidad. No todas las personas que presumen dominio en los diversos medios publicitarios cuentan con la validez, experiencia o capacidad de diagnóstico para ofrecer un servicio integral a propósito de un tema sumamente importante para el desarrollo organizacional, sobre todo cuando éste comienza a mostrar sus atributos más finos y acentuados.
De hecho, muchos servicios atractivos que parecen dar respuesta a las problemáticas institucionales resultan -a la postre- fraudulentos o en el mejor de los casos incompletos, trayendo a los empleadores problemas futuros que agravarán aún más la situación que buscaban solucionar.
A partir de la entrada en vigor de la NOM 035 (el 23 de octubre de 2019 en su Primera etapa) y la NOM 036 (el 2 enero de 2020 en su Parte 1: Manejo manual de cargas), un despliegue comercial se ha desatado en las redes sociales sobre qué consultora, firma o grupo de especialistas conviene contratar para atender las disposiciones de ambas Normas, procurando con ello responder a su cumplimiento y evitando paralelamente sanciones económicas por parte de la autoridad competente.
Mientras los empresarios se hacen preguntas, formulan cálculos y programan gastos o montos de inversión para obtener una correcta asesoría, algunos oportunistas aprovechan esta temporada alta para ofertar talleres, cursos y conferencias que no siempre cumplen con los requerimientos necesarios para brindar una adecuada prestación de servicios.
Advierto que este nos es un artículo con tinte descalificativo y reconozco por el contrario a las empresas que se han estado esforzando por brindar programas integrales de capacitación apegados a todos y cada uno de los estándares que las Normas mencionadas implican.
La verdad sobre las Normas de la STPS
Sucede a menudo que después del curso express que se vende por una compañía principiante y de muchas preguntas no resueltas, los directivos de unidades de negocio siguen teniendo dificultades para interpretar y aplicar los criterios de las NOM 035 y 036.
¿Cuáles son las razones por las que no se están cubriendo las expectativas del cliente?, ¿cómo y dónde podemos verificar que los procedimientos, métodos y contenidos que se ofertan a las organizaciones cubren en verdad con las condiciones legales y organizativas? Y sobre todo, ¿qué deben saber los empresarios para detectar a través de un necesario ejercicio de percepción si la empresa que presta servicios de capacitación sabe de lo que está hablando?
Lo primero que debemos cotejar es que las prestadoras de servicios te ayuden en el diagnóstico, análisis, detección, diseño de proyectos de mejora, implementación, retroalimentación y evaluación de los factores de riesgo que pueden afectar tu espacio laboral.
Los rubros a considerar son los factores de riesgo psicosocial y factores de riesgo ergonómico. Como usuario y comprador puedes y debes exigir por escrito una referencia sobre el perfil de sus miembros, trayectoria, experiencia en el ramo y cartera de clientes.
Aunque existe un cierto vacío legal actualmente que no ha vuelto necesario el punto de este párrafo, agrega valor que las consultoras estén dadas de alta en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social o bien que sus programas estén certificados por dicha dependencia; esto para contar con una validez institucional que en su momento pueda emitir la autoridad directamente involucrada en el tema.
Ya que el carácter de las Normas es obligatorio y tiene relación directa con varios fundamentos legales, haz preguntas concretas que te ayuden a corroborar que tus interlocutores (en este caso la agencia de servicios que ostenta experiencia) poseen la destreza necesaria para brindarte la consultoría que requieres.
En tal caso interroga sobre Ley Federal Del Trabajo (Art. 132. Fracc. 16 y 17), o el Reglamento Federal de Salud y Seguridad en el Trabajo. Pregunta sobre la Ley Federal sobre Metrología y Normalización, las Sanciones mencionadas en los Art. 992 y 994 de la LFT, o pide que te reseñen aspectos del DOF que se relacionan con variables muy específicas para conocer su enfoque epistémico y metodológico ante estos recursos documentales.
Al asesorarte toma en cuenta estos aspectos
Otro paso insoslayable es requerir un estudio o caso de éxito de alguna empresa que, a través de sus servicios, haya modificado las políticas laborales o presentado una mejora sustancial en su entorno organizacional.
No está de más pedir que te dejen mirar más de cerca (sin necesidad por supuesto de comprometer su información privada) sus guías de observación diseñadas por profesionales (LRI´s, psicólogos laborales, consultores certificados, etc.), materiales e insumos que usan en las sesiones presenciales o ayudan a dar la retroalimentación que buscas efectivamente.
Ambas Normas se inclinan hacia objetivos específicos que están impulsando reformas en las prácticas de tu organización, por ello todo material digital o impreso que la consultora utilice debe favorecer la consolidación de estrategias prácticas y seguras que te permitan redefinir la cultura corporativa que le da solidez a tu compañía.
Un paso más (antes de pasar a los ítems), es verificar hasta qué nivel la consultora te puede apoyar: a) nivel diagnóstico-informativo, b) nivel de asesoramiento y capacitación o c) nivel procedimental-práctico. En este último caso deberás exigir conocer su plan de trabajo, cronograma que usan en base a planificadores y acciones reales implicadas en el producto que te ofrecen:
- Entendimiento de las Normas de forma objetiva con base en el DOF.
– Modelo para el desarrollo y aplicación de encuestas.
– Metodología en el levantamiento de información.
- Tipo de esquemas del análisis de información (mallas, diagramas u otros recursos impresos o bases de datos, concentrados digitales y resúmenes electrónicos con escalas y métricas para futuras referencias de control interno).
– Reportes ejecutivos y estadísticos para efectos de contraloría.
– Retroalimentación del clima organizacional con encuestas de salida viables.
– Portafolios que apoyen en la identificación de áreas de oportunidad para mejorar la toma de decisiones.
Si no estás seguro de que la empresa realice estas actividades o recibes una negativa para conocer esta información, es preferible seguir buscando o pedir una referencia profesional a un empresario que haya contratado un servicio con garantía de calidad.