Fuente: El Financiero
El fabricante alemán de indumentaria deportiva Puma dijo que sus ganancias del segundo trimestre cayeron menos de lo previsto, ayudadas por la venta de camisetas de selecciones que participaron en el Mundial de Brasil 2014 y por un nuevo acuerdo alcanzado con el Arsenal de Inglaterra.
Puma está tratando de ganar terreno frente a rivales más grandes como Nike y Adidas, apuntando a sellar acuerdos importantes con clubes o deportistas. Con ese fin, la firma alemana derrocó a Nike como proveedor de la indumentaria del Arsenal del fútbol inglés.
Puma reportó que las ganancias antes de intereses e impuestos (EBIT) cayeron 60 por ciento a 12 mil 600 millones de euros, equivalentes a 16 mil 920 millones de dólares, mientras que su utilidad neta se redujo 76 por ciento a 4 mil 200 millones de euros.
Puma lanzará su mayor campaña de marketing realizada hasta la fecha el 7 de agosto con miras a los Juegos Olímpicos de 2016. En la campaña destacan el atleta jamaiquino Usain Bolt, el futbolista italiano Mario Balotelli y el golfista Rickie Fowler.
La firma alemana dijo que los gastos operacionales del segundo trimestre se mantuvieron prácticamente sin cambios, a pesar del alza en el gasto de marketing en torno a la Copa del Mundo, donde patrocinó a ocho selecciones.
El presidente ejecutivo de la firma, Bjorn Gulden, dijo que las ventas de los botines y de camisetas de selecciones superaron las expectativas dePuma.
Gulden aseguró además que las primeras ventas de las réplicas de las camisetas del Arsenal, que salieron al mercado en julio, habían sido buenas en todo el mundo, incluso en Estados Unidos y Asia.
«El del Arsenal fue un gran acuerdo para Puma tanto financiera como estratégicamente (…) Eso se podrá ver en las cifras de ahora en adelante», dijo Gulden durante una conferencia telefónica con medios.
Las ventas trimestrales del grupo cayeron 5.8 por ciento a 652.2 millones de dólares, pero subieron 0.6 por ciento al excluir el impacto de la volatilidad monetaria.