En la búsqueda constante por brindar una educación de excelencia, Mount View Canadian School se ha posicionado como una institución educativa destacada que aplica la reconocida metodología canadiense.
En entrevista para Líder Empresarial, Mariana Andrea Prieto Guerrero, directora del kinder nos comparte las principales bondades que hacen de Mount View una opción ideal para el desarrollo integral de los niños y niñas.
Inmersión total al inglés
Con clases impartidas íntegramente en inglés, a excepción del taller socioemocional que se realiza en español para fomentar la expresión emocional en la lengua materna, los estudiantes se sumergen en un ambiente inmersivo diseñado para el inglés desde una edad temprana.
La exposición constante al inglés desde una edad temprana tiene un impacto significativo en el desarrollo cognitivo de los estudiantes. Al estar inmersos en un ambiente donde el inglés es la lengua principal de comunicación y aprendizaje, los estudiantes se ven obligados a procesar información, comprender conceptos y expresarse en este idioma de manera constante
“De esta manera, el niño asimila el inglés como si fuera su lengua materna, lo que promueve una flexibilidad cognitiva excepcional, lo cual trae muchísimos beneficios”, explica Mariana.
Infancias valientes, perseverantes y cálidas
La valentía, la perseverancia y la amabilidad son las piedras angulares en la formación de valores de Mount View Canadian School. “Son los valores que fomentamos a todos los niños: que sean valientes para tomar y afrontar los retos que se les presenten, que tengan la perseverancia para permanecer en estos desafíos hasta lograr las metas que ellos tienen y la amabilidad, que van de la mano con la calidez y las habilidades sociales que inculcamos”, señala.
Metodología basada en el juego
Mount View trabaja a través de centros de aprendizaje, donde las aulas están organizadas para desarrollar habilidades de manera lúdica. El kinder cuenta con un centro de matemáticas, donde los niños exploran conceptos matemáticos con materiales concretos y juguetes.
Tienen otro centro de lectoescritura y de construcción, donde las y los niños utilizan bloques y cubos magnéticos para desarrollar habilidades motrices y creativas; otra unidad sensorial, donde a partir de diversos materiales exploran sus sentidos. En ‘Drama’, otro centro de aprendizaje, los niños participan en juegos de roles para desarrollar habilidades socioemocionales.
«Nuestra creencia es que si el niño se siente feliz, seguro y en un ambiente cálido, aprenderá lo que le presentemos. Los niños tienen una naturaleza curiosa y su cerebro está constantemente aprendiendo”, resume Mariana.
Cimientos para el futuro aprendizaje
El programa Neuromotor de Mount View está basado en el método DOMAN, enfocado en el desarrollo de habilidades motrices que son fundamentales para establecer las bases cerebrales necesarias en el futuro aprendizaje de matemáticas y lectoescritura. «A través de la clase de neuromotor, se estimulan las áreas cerebrales que serán fundamentales para su desarrollo«, observa la directora.
El pilar de la inteligencia emocional
La inteligencia emocional ha sido descrita como un factor crucial para la felicidad, el liderazgo y el éxito profesional. “Es incluso más importante que los aprendizajes cognitivos, porque permiten a una persona regular sus emociones, mantenerse enfocada en sus metas, establecer relaciones sociales y alcanzar mayores logros”, refiere Mariana.
Investigaciones apuntan a que la etapa preescolar es la etapa óptima para desarrollar la inteligencia emocional, pues los niños exploran sus emociones, aprenden a manejarlas y cultivan amistades.
“En Mount View se imparte un taller de inteligencia emocional una vez a la semana. Contamos con un programa propio desarrollado por nuestra escuela, lo que nos diferencia de otras instituciones. Durante estos 30 minutos, un psicólogo guía a los niños para establecer límites, expresar emociones con palabras, identificar sus sentimientos y mejorar sus habilidades interpersonales”, resume Prieto Guerrero.
Solucionadores de retos
A través del taller de Makerspace y clases de arte y música, Mount View brinda a los niños la oportunidad de resolver diferentes retos que incentivan su creatividad en la resolución de problemas.
«Makerspace es un espacio donde les brindamos la oportunidad, el material y el espacio para encontrar soluciones. Todos los niños y personas son creativas, pero la capacidad de crear surge si se nos proporciona la oportunidad», menciona Mariana.
Niños independientes
El programa de Mount View Canadian School integra clases de cocina y vida práctica para desarrollar habilidades que le permitan a los niños ser autosuficientes en el futuro.
«Queremos que aprendan a pelar frutas, servirse agua de una jarra, preparar limonadas, sándwiches, galletas, amasar…Esta actividad tiene dos objetivos: trabajar su motricidad fina, permitiendo que sus deditos adquieran estas habilidades, pero por otro lado, fomentamos su confianza y su sentimiento de logro. Quizás en casa no les permitan usar vasos de vidrio o usar cuchillos, pero aquí en la escuela tienen un ambiente seguro para desarrollarse«, finaliza Mariana.