Mayo fue el segundo mes del 2022 con retroceso para la Inversión Fija Bruta (IFB) de México, señalaron cifras desestacionalizadas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Respecto al mes inmediato anterior, la IFB cayó 1.2%. Por componentes, el gasto de la construcción bajó 2.7% y el correspondiente a maquinaria y equipo en 1% en el mismo periodo de comparación.
De acuerdo al reporte de Monex, la caída mensual es seis veces mayor a la caída que reportó el Indicador Global de Actividad Económica (IGAE) en el quinto mes de 2022.
De hecho, este retroceso compensa dos terceras partes del incremento que se experimentó en abril. A su vez, vuelve a dejar al indicador con cifras bastante rezagadas frente a su nivel pre pandemia (-2%) y precrisis (-9.3%).
Igualmente, el dato en mayo responde al mayor deterioro de la construcción, sector con muy poco progreso en el año e incluso se ubica debajo del promedio registrado en 2021, indicó la consultora.
Al interior de esta industria, la construcción del tipo residencial cayó 3.3%, mientras que la de tipo no residencial subió 1%.
En cuanto al segmento de maquinaria y equipo, la inversión en el ramo nacional cayó 0.4%, mientras que en el sector importado se deterioró en 1.5%.
¿Recesión económica a la vista?
Para Monex, la inversión es uno de los grandes pendientes en el marco económico, sobre todo a través de la generación de certidumbre en las condiciones del largo plazo y del respeto al estado de derecho, dos de los factores centrales para las decisiones en este sector.
Con los datos más recientes, agregó, hay una probabilidad moderada una nueva baja de la economía en julio y derivaría en una contracción trimestral.
“Lo que encenderá las alarmas por una posible recesión en el corto plazo aunque, desde nuestra perspectiva, el riesgo más fuerte se concentrará en la primera mitad de 2023”, finalizó.