¿Te imaginas poder detectar fallas microscópicas en una pieza de avión sin tocarla? ¿O garantizar la autenticidad de una miel regional frente a productos importados? Eso es justamente lo que hace el Dr. Manuel de la Torre Ibarra, investigador del Centro de Investigación en Óptica (CIO), con algo tan cotidiano —y a la vez tan poderoso— como la luz.
Desde su laboratorio en Aguascalientes, el doctor de la Torre trabaja en el área de metrología óptica y pruebas ópticas no destructivas, una especialidad que permite medir y analizar materiales sin alterarlos, utilizando tecnologías como láseres, cámaras hiperespectrales y microscopía avanzada.
Medir con luz: precisión de otro nivel
En lugar de usar herramientas físicas para medir objetos, el Dr. de la Torre utiliza luz infrarroja, ultravioleta o blanca para estudiar desde materiales industriales hasta tejidos biológicos. Por ejemplo, puede observar cómo se deforma una pieza de avión durante una vibración, o cómo se distribuye el estrés mecánico en un hueso humano, todo sin contacto físico.
Una de las técnicas más utilizadas es la Tomografía de Coherencia Óptica (OCT), que permite observar estructuras internas con una resolución de micrones. ¿El equivalente? Es como pasar de una ecografía a alta definición que revela detalles invisibles al ojo humano.
Aplicaciones industriales: de turbinas a bolsas de aire
Su trabajo tiene implicaciones directas para la industria. Ha colaborado con empresas en aeronáutica, automotriz y manufactura avanzada, evaluando desde turbinas eléctricas hasta el despliegue de bolsas de aire. También desarrolló un sistema holográfico acoplado a un túnel de agua para estudiar el arrastre aerodinámico de vehículos sin necesidad de un costoso túnel de viento.
Además, su capacidad para detectar deformaciones de apenas unos micrones ha sido útil en el diseño de piezas más seguras y duraderas, como paneles de fibra de carbono, costillas de alas de avión o componentes para electrodomésticos.
La óptica también protege alimentos y salud
En los últimos años, el Dr. de la Torre ha incursionado en la industria alimentaria y biomédica. Uno de sus proyectos actuales es la caracterización óptica de mieles regionales (como la de mezquite o saramago) para proteger a los productores locales frente a la competencia desleal de productos importados.
También ha estudiado mecánicamente la córnea humana, el comportamiento viscoelástico del hueso e incluso el colesterol cristalizado en arterias, lo que podría tener implicaciones en diagnósticos médicos.
¿Qué puede hacer por la industria?
El mensaje del Dr. de la Torre es claro: la metrología óptica puede ser un aliado estratégico en procesos de control de calidad, desarrollo de nuevos productos y certificación de materiales. Al ofrecer una precisión difícil de igualar y sin dañar las piezas, su laboratorio se convierte en un socio ideal para empresas que buscan innovar.
Desde la caracterización de materiales compuestos hasta la validación de procesos industriales o alimentarios, el CIO —y en particular el área del Dr. de la Torre— ofrece herramientas tecnológicas que pocas veces se encuentran disponibles comercialmente.
En una región que busca fortalecer la relación entre ciencia e industria, ejemplos como este muestran que la innovación no siempre viene de Silicon Valley.
A veces, basta con prender la luz.