Por Germán Rebolledo
Hace una semana el equipo multidisciplinario de 28 elementos (conformado por bomberos, paramédicos y elementos de Protección Civil), estudiantes de la Universidad Panamericana, diseñadores del robot, Ixnamiki Olinki, y por supuesto, el binomio canino de 5 años de edad conocido como “Humo”; partieron rumbo a la Ciudad de México y el estado de Morelos para apoyar en las labores de rescate.
De forma conjunta, también se desplazarían 16 paramédicos especializados del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA), para sumarse a la brigada de apoyo en estas entidades.
Su estadía en las zonas afectadas sería una heroica jornada y los objetivos que incentivaron a estos grupos se cumplirían con creces. El arduo trabajo de las brigadas, en ocasiones de más de diez horas, se vería reflejado en el rescate de seis personas y en la recuperación de ocho cuerpos.
El día lunes, los colectivos que salieron de Aguascalientes regresarían tras haber logrado su cometido. Los reconocimientos por parte de las autoridades no se hicieron esperar, comenzando por el de la Alcaldesa de Aguascalientes, Tere Jiménez, quién señaló el heroísmo y dedicación de los 28 elementos interdisciplinarios. De igual forma, el mandatario estatal, Martín Orozco, dedicó unas palabras de felicitación por la gran labor que desarrollaron los paramédicos del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes.
La paramédico del ISSEA, Guadalupe López, nos contó un poco de su experiencia:
“Tuvimos muchos retos, pero parte de eso sería encontrar ese valor de dónde sea, a pesar de que tenemos la vocación de apoyar o de encontrar personas, es demasiado el valor que se ocupa y quién te saca adelante son los mismos voluntarios” señaló la rescatista.
Con respecto al recibimiento que tuvieron por parte de las autoridades que estaban en la Ciudad de México, comentó:
“El primer día que llegamos, no había un orden claro. Al principio sí veíamos que estábamos sobrados, que había mucha población civil, nosotros tuvimos que interactuar con ERUM, con ellos tuvimos un gran apapacho, nos prestaron equipo y nos incluyeron para trabajar juntos».
A pesar de no haber visto trabajar a “Humo”, tuvo contacto con algunos otros binomios caninos y fueron una de las cosas que más le sorprendieron:
“Se te salen las lágrimas cuando el binomio ladra y te indica que hay vida ahí o que hay una persona. Y que es algo por lo que estás ahí parado, es tú motivación».
El trabajo que desarrollaron tanto en la Ciudad de México, como en Morelos, no fue fácil. Durante seis días, mujeres, hombres y un can de gran corazón nos demostraron lo que significan las palabras: solidaridad y valor. Los rescatistas ya se encuentran de regreso en Aguascalientes , hoy más que nunca nos hacen sentir orgullosos porque han abrazado a México y no lo han soltado.
Gracias.