Quizá como celebración del Día del Padre acudas a una cena-maridaje en algún restorán, club social o en la casa de algún familiar o conocido. Es un excelente plan para consentir a tu ser querido, en tanto es una oportunidad para vivir un auténtico carnaval de aromas, sabores, texturas y colores.
No obstante, para redondear tu experiencia es importante que no cometas los siguientes errores que nos comparte Marisa García Ruiz, experta en vinos y sommelier profesional por la Associazione Italiana Sommelier:
Sé puntual. Nunca llegues tarde a una cata ya que puedes perderte los primeros tiempos.
No tomes el vino en cuanto te lo sirvan: espera a hacer la cata junto con el grupo para que puedas apreciar las cualidades del vino.
No agites jamás en la copa los vinos espumosos: Lo único que lograrás es liberar el gas carbónico que produce las burbujas y que te da la efervescencia del vino.
No te vayas de la cata sin hacer tus anotaciones: Te servirán para recordarte las propiedades de un vino que te haya gustado particularmente.
No tomes destilados antes de empezar la cena maridaje: Estas bebidas podrían modificar la apreciación del vino, sobre todo con los primeros vinos ligeros.
No te apresures a terminar un plato para continuar con el siguiente vino: es mejor darle su tiempo a cada plato para poder disfrutar al máximo la experiencia.
No es necesario terminar todo el vino de tu copa: Si crees que es suficiente, deja lo poco que te queda para poder seguir apreciando los que siguen.