Por: Tomás Ramírez Reynoso
La evolución de la población del estado de Aguascalientes en los últimos 125 años se ilustra en los dos gráficos de líneas abajo. Se aprecia que, entre 1895 y 1921, el monto de la población era pequeño y que no había una tendencia marcada al incremento, pues se alternaban periodos de aumento y de disminución.
Después de concluida la Revolución Mexicana, se registra una etapa de crecimiento poblacional sostenido, que llegó a su mayor intensidad entre 1970 y 1980 (con una tasa de 4.2%). En estos diez años, la población de Aguascalientes se incrementó 181 mil 297 personas (53.6%), que equivalen a prácticamente los residentes de la entidad en 1950.
A partir de 1980 el ritmo del incremento demográfico viene a la baja; no obstante, Aguascalientes es uno de los estados con mayor TCD en el país. De hecho, entre 2010 y 2020, su tasa de 1.9% le ubicó en la quinta posición nacional, solamente detrás de Quintana Roo (3.5%), Querétaro (2.7%), Baja California Sur (2.3%) y Nuevo León (2.3%).
Al igual que a escala mundial y nacional, al interior de Aguascalientes hay diferencias significativas en el ritmo de crecimiento de la población, como se aprecia en el cuadro siguiente.
| Aguascalientes, 2020. Tasa de Crecimiento Demográfico (TCD) y Periodo Potencial de Duplicación de la Población (PPDP) por Municipio | ||
| Municipio | TCD (%) | PPDP (años) |
| San Francisco de los Romo | 5.8 | 12 |
| Jesús María | 2.8 | 25 |
| Estado | 1.9 | 37 |
| Aguascalientes | 1.8 | 39 |
| Rincón de Romos | 1.6 | 44 |
| Tepezalá | 1.4 | 50 |
| Asientos | 1.3 | 54 |
| Cosío | 1.3 | 54 |
| Pabellón de Arteaga | 1.3 | 54 |
| San José de Gracia | 1.3 | 54 |
| El Llano | 1.1 | 64 |
| Calvillo | 0.8 | 88 |
Papel cardinal de los municipios de Aguascalientes, Jesús María y San Francisco de los Romo
El municipio de Aguascalientes y en concreto la ciudad capital, determinan en gran medida el comportamiento demográfico de la entidad. Desde finales del siglo pasado, la expansión física de la ciudad de Aguascalientes rebasó los límites municipales y transfirió su dinámica al municipio de Jesús María en primer lugar y al de San Francisco de los Romo más recientemente. No resulta extraño que estos dos tengan las mayores tasas de incremento poblacional, en tanto que el resto de los municipios registran tasas por debajo del promedio estatal.
Es conveniente para todos y en particular para las autoridades estatales y municipales tener en cuenta la magnitud y el comportamiento de la TCD porque este indicador permite calcular, bajo el supuesto de que la tasa se mantenga constante, el Periodo Potencial de Duplicación de la Población (PPDP).
Aunque el ritmo de crecimiento poblacional de la entidad en conjunto viene a la baja desde hace cuatro décadas, aún tiene el potencial para duplicar sus habitantes en 37 años. Ahora bien, a escala municipal se aprecian comportamientos contrastantes pues, mientras que Calvillo podría duplicar su población en 88 años, San Francisco de los Romo podría hacerlo en apenas doce.
Más sorprendente aún resulta observar lo anterior a escala de localidad. En el propio municipio de San Francisco de los Romo se tienen localidades con tasas de crecimiento demográfico verdaderamente espectaculares entre 2010 y 2020 (del orden del 20% promedio anual). Se trata de los fraccionamientos Urbivillas del Vergel y La Ribera, que durante la década pasada multiplicaron su población en 38 y 19 veces, respectivamente, al pasar la primera de 88 pobladores en 2010 a 3,346 en 2020 y la segunda de 639 a 12,162.
Salvo muy contadas excepciones, constituye una regla en los asentamientos urbanos de crecimiento explosivo situados en las periferias de grandes y medianas ciudades, la presencia y acumulación de rezagos en la dotación de servicios básicos en las viviendas, en la infraestructura urbana y en otros servicios fundamentales como los de seguridad, transporte, salud y educativos, por mencionar los más representativos, lo que coloca a los habitantes de estos asentamientos en situación de desventaja y vulnerabilidad sociales.
La zona oriente de la ciudad de Aguascalientes y asentamientos periféricos de la cabecera municipal de Jesús María son claros ejemplos al respecto. Y es que, de mantener su actual ritmo de crecimiento demográfico, las dos localidades de San Francisco de los Romo arriba mencionadas duplicarían su población en tan solo tres años y medio.
¿Están las autoridades del estado y del municipio preparadas para responder de manera adecuada a un reto de esta magnitud? Es de gran importancia que las autoridades estatales y municipales consideren el comportamiento y las características de sus poblaciones como un elemento transversal, es decir, siempre presente en la propuesta, análisis y evaluación de todas sus políticas públicas.