Sensibilidad y dedicación son un buen complemento cuando las condiciones lo permiten. Edith Bañuelos Álvarez ha causado revuelo por la visión de la realidad que transmite a través del arte. Desde la infancia, la pintora valparadicense se vio inmersa en esa disciplina, pues su padre (maestro de dibujo técnico) disponía de libros y materiales para despertar su creatividad.
Desde el inicio tuvo el apoyo de su familia, por lo que desarrolló sus habilidades en el dibujo y pintura sin necesidad de educación formal. A base de prueba y error, pero con mucha imaginación, construyó su estilo e imprimió su marca en cada una de sus creaciones.
“A los 14 años realicé varias obras retratando a México, sus costumbres y su folklore; tal vez, sin tener consciencia de ello, estaba influenciada por los grandes muralistas. En los últimos años me ha inspirado la obra de grandes pintores hiperrealistas mexicanos como Omar Ortiz, Juan Carlos Manjarrez y Magda Torres Gurza, una de las pocas mujeres hiperrealistas”, exclamó.
En lo profesional, se desempeña como diseñadora gráfica, ilustradora y docente; mientras que en lo personal es artista visual, amante de la fotografía y madre de dos pequeños. Sus labores se centran, actualmente, en el diseño publicitario para varias empresas y las clases para cuatro licenciaturas diferentes.
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Pasión, diversidad y emoción
Líder Empresarial (LE): En estos años que te has dedicado a las artes plásticas, ¿cómo se ha desenvuelto tu estilo?
Edith Bañuelos (EB): Pinto buscando el dominio de la técnica que permita ver los detalles de la realidad, a modo de un espejo con aumento, buscando reparar en cada pincelada un acercamiento al detalle de la cotidianeidad que muchas veces pasa desapercibido por nuestros ojos.
LE: ¿Qué papel juega Zacatecas en tu obra?
EB: Zacatecas es sin duda uno de mis temas favoritos, no sólo porque me siento muy orgullosa de mis raíces, sino por la gama de color en sus paisajes, arquitectura, tradiciones y folklore; por la rica oferta cultural de sus museos y la herencia gráfica de grandes maestros. Es, sin duda, inspirador para muchos artistas.
LE: ¿Cómo es ser pintora en México hoy en día?
EB: Es como en cualquier otro trabajo, se necesita paciencia, entrega y mucha disciplina para poder superarse a sí misma en el ejercicio de la profesión. Aunque sin duda el arte exige un poco más en cuestión de entrega, pues se deja gran parte de ti en cada obra. Aún me queda mucho camino por recorrer y mucho por aprender, a pesar que ya tengo años pintando, siento que estoy iniciando pues cada vez que me siento frente al caballete aprendo algo nuevo.
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