Si enlistamos a las industrias más afectadas por el coronavirus, la automotriz ocuparía los primeros lugares, sin lugar a duda. Primero, el sector manufacturero más importante de México se vio forzado a cerrar provisionalmente sus fábricas tras la declaratoria de Emergencia Sanitaria por el Consejo de Salubridad.
Posteriormente, demoró semanas en lograr la anuencia del Gobierno Federal para ser considerada actividad esencial y permitir el retorno de sus trabajadores a las fábricas. Asimismo, el impacto de la pandemia supuso interrupciones en la cadena de suministro de la industria automotriz, derivando en retrasos y paros parciales de las factorías ante la falta de insumos.
Tampoco podemos olvidar los efectos de la crisis económica más fuerte en el último siglo, lo que trajo caídas significativas en el mercado de vehículos ligeros, pese a que en los últimos meses ha venido recuperándose paulatinamente.
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A esta caótica situación se suma la escasez a nivel global en el abastecimiento de semiconductores, pieza imprescindible para construir los circuitos electrónicos de los automóviles, lo cual está orillando a las ensambladoras a detener parcialmente sus plantas otra vez.
¿Qué automotrices se han visto obligadas a detener sus operaciones? Aquí hacemos un recuento general.
Nissan
La ensambladora de origen japonés confirmó que deberá detener sus operaciones en una planta de Aguascalientes (tiene dos en la entidad) ante la falta de semiconductores. Un reporte de Reuters indicó que la compañía planea cerrar la factoría por espacio de una semana durante el mes de mayo.
La agencia de noticias refirió que Nissan continúa haciendo ajustes en sus procesos de producción para minimizar el impacto provocado por la falta de insumos a nivel nacional e internacional.
General Motors
En febrero, la automotriz norteamericana determinó el parón de actividades en dos plantas ubicadas en Estados Unidos y la factoría situada en San Luis Potosí. Apenas unos días atrás el complejo potosino reinició operaciones tras casi dos meses de pausa. A nivel global, los modelos del corporativo afectados por la escasez de chips son el Chevrolet Colorado, el GMC Canyon, Cadillac CT4 y CT5, Chevy Camaro, entre otros.
Ford
Reuters también informó que del 3 al 17 de mayo, la planta de Ford en Sonora detendrá operaciones por la falta de insumos. Durante ese lapso, los trabajadores recibirán el 75% de su sueldo, señaló el reporte. La empresa automotriz sí informó que debido al desabastecimiento de semiconductores recortará la mitad de su producción en el segundo trimestre.
Toyota
La compañía japonesa anunció en marzo un recorte a la producción de vehículos en Norteamérica, impactando en las factorías que tienen establecidas en Guanajuato y Baja California, México.
“Resultado de diversos factores como la restricción de suministro de semiconductores, el impacto de las condiciones climatológicas recientemente vividas en Estados Unidos y la actual escasez de petroquímicos, la producción de algunas de nuestras plantas en la región de Norteamérica se verá afectada, entre ellas, las ubicadas los estados de Baja California y Guanajuato”, sostuvo Marisol Blanco, gerente de Relaciones Públicas de Toyota México según declaraciones recogidas por El Economista.
Honda
La planta de Honda, ubicada en Celaya, Guanajuato, registró un parón de alrededor de 10 días en la producción de carros y motores por la falta de transmisores. La empresa en México también aludió al impacto de COVID-19, la congestión en varios puertos así como el severo clima invernal vivido en Estados Unidos como factores que han alterado la cadena de suministro y, naturalmente, la producción de las plantas del corporativo en Norteamérica.
“Nuestros equipos de compras y producción están trabajando para limitar el impacto de esta situación y están ajustando la producción según sea necesario para administrar cuidadosamente el suministro disponible de piezas y satisfacer las necesidades de nuestros clientes”, suscribió la compañía.
Audi
Durante los primeros meses de 2021, la alemana de vehículos de alta gama ha ido reportando paros técnicos ante la escasez de insumos para la producción de sus automóviles.
«No son problemas mayores, se van ahciendo paros técnicos regularmente en sábado en caso de haber algún problema. Esperamos que la situación se vaya componiendo poco a poco, son retos muy fuertes a futuro, pero esperamos que se vaya solucionando«, declaró a principios de abril César Orta Briones, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi México.
La empresa también detuvo momentáneamente las operaciones de su planta de Neckarsulm, afectando la producción de los modelos A6 y a7. «La situación respecto al suministro de semiconductores es compleja y volátil«, comentó un representante de la compañía.
