Fuente: puertovallarta.net
No es ningún secreto que muchas de las playas más bonitas y pueblos más interesantes se encuentran en México, específicamente en el marco de Puerto Vallarta. La Bahía de Banderas ofrece pequeñas playas paradisiacas, pintorescos pueblos, atractivos naturales y mucho más…
Más allá de Boca de Tomatlán se encuentra una de estas hermosas playas, Las Ánimas de Quimixto, coloquialmente conocido sólo como Las Ánimas.
Para llegar a playa Las Ánimas, al igual que la mayoría de las playas al sur de la costa jalisciense, es necesario tomar un taxi acuático. Las Ánimas es la primer parada que realizan los taxis acuáticos en su ruta hacia el sur de la Bahía de Banderas.
También se puede llegar vía terrestre, no obstante, el camino puede llegar a ser más largo debido a las curvas de la carretera; eso sí, a lo largo se pueden visualizar hermosos paisajes.
Las Ánimas erige como un ejido indio, administrado por la comunidad indígena de Chacala (una aldea en las montañas, cerca de El Tuito).
Otro dato curioso sobre la playa, de acuerdo a puertovallarta.net, es que en décadas pasadas, el autor William Bill Reed y su esposa Sylvia Rosa Garcés Marroquí vivieron en esta playa por muchos años; específicamente en la «Casa Guillermo». Así, su libro «Escape al paraíso, una odisea mexicana» está basado en su experiencia como residente de Las Ánimas.
Como valor agregado, la playa cuenta con un muelle que hace mucho más fácil el embarcar o desembarcar de las lanchas.
Otras actividades de las que se pueden disfrutar en la playa es un recorrido en el banana boat o en lancha, salto en paracaídas, tour de cannopy, tirolesas, puentes colgantes, senderismo y hasta un tour de tequila.
Pero si eres de los que prefiere un momento de desconexión, el sitio también es ideal para broncearse y ¿por qué no? con una fría margarita o cerveza en mano.
Aunado a su belleza natural -arena fina y clara, agua cristalina y olas suaves-, Las Ánimas destaca por su variada oferta gastronómica. Puedes elegir entre restaurantes locales o vendedores ambulantes, para degustar platillos típicos de la zona como ceviche, aguachile y mariscos frescos.
A lo largo de la playa y como parte de su característica vegetación, también puedes encontrar diversas plantaciones de mango, papaya, coco y plátanos.
Otro plus de la playa, es que muy cerca se encuentra el beach club Casitas Maraika, un sitio de música, comida y bebidas, actualmente en boga.