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Laboratorio mexicano: Revoluciona el futuro de la carne bovina

laboratorio mexicano

Laboratorio mexicano esta utilizando tecnología de vanguardia, este laboratorio ubicado en México ha desarrollado un método que elabora carne bovina de manera artificial, sin necesidad de criar o matar animales.

Laboratorio mexicano revoluciona a la industria

En México, la startup «Forma Foods» se destaca en este campo, llevando años fabricando carne in vitro en su laboratorio. Esta empresa, que surgió de la Escuela de Ingeniería y Ciencias del Tecnológico de Monterrey, se posiciona como una opción más sostenible y ética frente a la ganadería extensiva.

Beneficios de la carne de bovino de laboratorio

Además de sus beneficios medioambientales y éticos, la carne de laboratorio ofrece ventajas nutricionales. Estudios citados en el artículo destacan que este tipo de carne contiene menos grasas saturadas y colesterol que la carne convencional. Además, se puede modificar para reducir el contenido de grasa o mejorar su perfil nutricional, lo que la convierte en una opción saludable para los consumidores preocupados por su dieta.

El desarrollo de la carne de laboratorio también podría tener un impacto positivo en la seguridad alimentaria y en la reducción del hambre en el mundo. Al no depender de la cría de animales, este tipo de carne podría producirse de manera más eficiente y a gran escala, lo que significaría un suministro más estable y accesible de proteínas para la población mundial.

La carne cultivada no solo elimina el sacrificio de animales, sino que también requiere menos espacio, agua, tierra y antibióticos que los sistemas ganaderos actuales. «Forma Foods» aspira a producir carne con mucha menos agua que la explotación bovina actual, buscando elaborar una tonelada de carne con solo el 10% del agua que se requiere actualmente en la ganadería intensiva.

¿Cómo se crea la carne de bovino en un laboratorio?

La «carne cultivada» o «carne de laboratorio» se produce a partir de una biopsia del ganado para aislar las células madre, las cuales se transfieren a biorreactores, donde se lleva a cabo el proceso biotecnológico para diferenciar las células y convertirlas en tejido muscular. Estas células son cultivadas y se multiplican en un entorno controlado hasta que se convierten en tejido muscular, creando un producto que se asemeja a la carne bovina tradicional, pero sin los impactos ambientales o éticos asociados a la cría de animales.

El objetivo es lograr una experiencia sensorial lo más parecida posible a la carne tradicional, ofreciendo fibrosidad y resistencia al morder.

Desafíos para su comercialización

Aunque la carne de laboratorio aún se encuentra en etapas de desarrollo y enfrenta el desafío de su comercialización a gran escala, se vislumbra un futuro prometedor para esta alternativa. Varios países, incluido México, están invirtiendo en la investigación y desarrollo de esta tecnología, lo que indica un interés creciente en esta nueva forma de producir carne.

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