Por María José Valdez Martínez
Cofundadora 02X y Venture Studio México
En la actualidad, el tema del desarrollo profesional femenino continúa siendo complicado. Aunque las oportunidades se han abierto, aún existe un juicio negativo sobre las trabajadoras por parte de las empresas.
Entrevista de trabajo a un hombre: ¿Cuál es tu experiencia? ¿Qué estudiaste? ¿Cuál es tu visión a largo plazo? ¿Expectativas de sueldo?
Entrevista de trabajo a una mujer: ¿Cuál es tu experiencia? ¿Estás casada? ¿Tienes hijos? ¿Cuánto tiempo planeas trabajar? Tu sueldo sería…
Estereotipos, falta de flexibilidad para lograr un balance entre vida personal y profesional, machismo, carencia de apoyo, falta de visión en cuanto a las capacidades femeninas en los negocios, costumbre de ver el ámbito empresarial como un mundo dominado por hombres, son algunas de las limitantes de crecimiento para las mujeres en el campo laboral.
No me gustaría culpar únicamente de esto a las empresas, ya que nosotras mismas (cada vez menos, por supuesto) aún tenemos la idea de que nuestro sitio está en la casa.
La falta de apoyo es la razón principal por la que muchas trabajadoras se retiran al convertirse en madres. De hecho, muchos creen que las mujeres no buscamos una ocupación profesional estable y de tiempo completo, lo cual es totalmente erróneo. Un sondeo realizado por la revista Forbes en cuanto al tipo de empleo que busca el género femenino registró lo siguiente: 84 por ciento de las encuestadas dijo que busca un trabajo de tiempo completo; 14 por ciento, de medio tiempo; y 2 por ciento, por proyecto o como freelance.
Muchas organizaciones podrían sorprenderse del desempeño laboral femenino, si contaran con una propuesta de plan de carrera que brinde estabilidad y flexibilidad, lo cual genera confianza, lealtad, responsabilidad y un gran sentido de pertenencia hacia la compañía. Por supuesto, es importante que nunca falten las métricas de desempeño con responsabilidades y metas específicas para equilibrar los beneficios otorgados con los resultados esperados.
Es una realidad que las mujeres consideran el hogar y la familia como parte de su vida; pero esto no debe estar peleado con las ganas de crecer en el ámbito profesional. Cada vez suele ser más común el término two income family, es decir, hombre y mujer aportan al presupuesto del hogar, haciendo posible que haya una mejor calidad de vida y provocando un círculo virtuoso en la economía del país, ya que aumentan el consumo familiar y buscan mejorar la formación educativa de sus hijos.
Un estudio de Mercer muestra que en 2014 sólo 12 por ciento de los ejecutivos en organizaciones de América Latina eran mujeres; sin embargo, las investigaciones sugieren que el futuro es promisorio y que este porcentaje ascenderá a un 39 por ciento en 2019, y sobrepasará el 50 por ciento en 2024.
Actualmente, a nivel global, Estados Unidos y Canadá (que se encuentran en la lista de los países más fuertes y estables económicamente hablando) son líderes en participación femenina en cuanto a roles de gerencia media y alta.
Además de hablar de equidad de género, me gustaría mencionar las cinco cualidades de las mujeres que fortalecen a las empresas, según la firma consultora de reclutamiento especializado PageGroup: capacidad de organización, multitasking, empatía, atención al detalle y les es más sencillo pedir ayuda.
Esto no es un tema de mujeres, es un tema de diversidad en los negocios, de desarrollar una mezcla de talentos y habilidades que incremente la productividad y rentabilidad. El mensaje para las mujeres es que cuando uno está apasionado con lo que hace, no hay discriminación de género que te pueda limitar.