Por Antonio Martín del Campo. Chairman 02X México y Venture Studio
“Si cambiamos por dentro y nos desarmamos al tratar constructivamente con pensamientos y emociones negativas, literalmente podemos cambiar el mundo”. Dalai Lama
No nos podemos equivocar, la batalla contra COVID-19 es una guerra, tan dañina como la guerra física. Esto se debe a que es ante todo una guerra emocional, no sólo financiera, económica, social y geopolítica. Los niveles de estrés son los más altos que he conocido, a nivel individual, comunitario, nacional y geopolítico. Y a nivel empresarial, siempre las malas emociones han conducido a empeorar las decisiones. Cuando un miembro de la familia comete un error que afecta a toda la familia, cualquier padre sabrá que lo más importante es no culpar, sino qué hacer. Una crisis es un evento. Suceden cosas malas. La culpa puede venir después. Pero es una acción inmediata que puede prevenir más daños.
La magia de esta guerra se va ganar desde el punto de vista emocional y uno de los enemigos a vencer, obviamente además del virus, es la infodemia.
Y es que si la economía es un estado de ánimo, el veneno que nos estamos tomando todos los días es la infodemia, la cual se define como una cantidad excesiva de información sobre un problema, de modo que la solución se hace más difícil. En febrero de este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) utilizó el término para referirse a la información (en su mayoría falsa) sobre el brote de COVID-19.
Aunada a esta información falsa, hay que tomar en cuenta que la información vende y para esto los medios sensacionalistas están alimentado todos los días al monstruo y como un gran ejemplo podemos observar los siguientes:
1. La economía de los EE.UU. podría tardar tres años en recuperarse de COVID-19
Según un nuevo informe de una de las consultoras de mayor prestigio en el mundo, y bajo la premisa de dos escenarios posibles, donde el mejor escenario sería si la respuesta de salud pública, incluidas las medidas de distanciamiento social y bloqueo, es inicialmente exitosa pero no previene el resurgimiento del virus, el mundo experimentará una recuperación económica “silenciada”. En este primer escenario, mientras que la economía global se recuperaría a los niveles previos a la crisis en el tercer trimestre de 2022, la economía de Estados Unidos necesitaría hasta el primer trimestre de 2023 y Europa hasta el tercer trimestre del mismo año.
En el segundo escenario, que es el más deseable, si la respuesta de salud pública es más fuerte y más exitosa, controlando la propagación del virus en cada país dentro de dos o tres meses, las perspectivas podrían ser más positivas, con una recuperación económica en el tercer trimestre de 2020 para los Estados Unidos, el cuarto trimestre de 2020 para China y el primer trimestre de 2021 para la zona euro.
Cabe mencionar que las últimas declaraciones del subsecretario Hugo López-Gatell fueron: “Esto no va a ser una epidemia corta, puede durar cuando menos 12 semanas, que es lo que duró en China, no necesariamente por las medidas extremas que se tomaron, ya vendrán los estudios y se verán los números de personas que se vieron infectadas, pero es el escenario mínimo que esperamos en México”. Días después matizó que para julio podría haber un descenso de la curva epidemiológica, pero la pandemia podría llegar hasta octubre. Si hacemos la suma de los meses más la situación económica del país podemos prepararnos más para el primero que para el segundo escenario.
2. Más de 100.000 Mypymes podrían cerrar sus cortinas de manera definitiva debido a las estrategias “tardías”
Según la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme) son completamente insuficientes las medidas que el gobierno federal ha establecido para enfrentar la contingencia por el COVID-19.
En este segundo ejemplo, todos estaremos de acuerdo que las Mypymes necesitan todo el apoyo que se puede conseguir y mucho más, sin embargo y sin taparnos los ojos a lo escandaloso, es una realidad que sabemos que sean cuales sea las medidas que se implementen serán insuficientes para el tamaño del problema y es momento de ser creativos y confiar las decisiones a los expertos y a lo mejor con lo que contamos en el país: la libre empresa.
Y es que estamos siendo vapuleados por una horda de malas noticias económicas que lo único que están ocasionando es una recesión más pronunciada, y es que en economía como política la percepción se convierte en realidad.
Sin duda, tu mundo y el mío son completamente diferentes a lo que vivíamos hace cuatro semanas, el virus ha cambiado todo para los negocios y para sus familias. Y siempre lo más importante serán las personas y la salud. Pero regresando a lo nuestro, estoy convencido de que las instituciones con mayor poder y capacidad para transformar las realidades de la gente, de nuestro país y del mundo, son las empresas y la sociedad real en su conjunto. Si nos remontamos a la historia el mercado, va a rebotar en los próximos meses, la economía mejorará en los próximos 9 a 15 trimestres, hoy toca reinventarnos, hoy toca sobrevivir y adaptarnos.
Pero la infodemia va estar ahí, haciéndonos dudar, metiéndonos miedo; en esta guerra emocional tenemos que identificar a los enemigos con la infodemia, aislarnos y no viralizarlos. En esta guerra nosotros podemos empezar hacer la diferencia en nuestros grupos de mensajería, en nuestras redes sociales y nuestras comunicaciones. Últimamente en algunos grupos en los que participo da pena ajena ver el estado de depresión colectiva en la que se encuentran, siempre buscando culpables, siempre atacando y lo peor tratando de hacer los chistes en un mundo que necesite la comedia pero que en definitiva hoy no toca, va haber personas que no estaremos o no estarán aquí cuando todo termine, familias que estarán sufriendo, y es que estamos en guerra.
Ahora es el momento para levantarnos. Para liderar nuestras empresas, nuestro país y nuestra sociedad. La silenciosa mayoría se tiene que manifestar, durante mucho tiempo hemos dejado ese poder a oportunistas y líderes que no necesariamente están ahí por un fin social, sabemos quiénes y cómo operan, pero, ¿saben?, hoy los necesitamos, necesitamos a todos y nos necesitamos todos. Es tiempo de unión, es tiempo en donde se unen todas las generaciones con un objetivo en común, sacar adelante a México, a nuestras familias y a nuestras empresas.
Ahora es el momento para adaptarnos como sociedad en su conjunto a esta nueva realidad, para mostrar nuestra su fuerza. Usa tus ventajas y compártelas. Emerge más fuerte y sé generoso en tu liderazgo, genera un testimonio constante en redes sociales y en tus medios de comunicación, tenemos que generar una corriente positiva que destruya a la infodemia, este es nuestro momento, estamos listos para pelear esta guerra desde nuestras empresas y como sociedad lo vamos a lograr.
“Hay un ciclo misterioso en los eventos humanos. A algunas generaciones se les da mucho. De otras generaciones se espera mucho. Esta generación tiene una cita con el destino”. Franklin D. Roosevelt