Casi catorce mil kilómetros separan a Arabia Saudita de México; una distancia que conlleva notables diferencias culturales pero que, al mismo tiempo, representa una oportunidad de intercambio social, político, empresarial y académico entre ambas naciones. Artemisa Jaramillo, guerrerense de 37 años, es testigo de esa puerta de cooperación…
Tras estudiar Inteligencia Artificial y Estrategia de Negocios en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés), y posteriormente realizar su doctorado en la Universidad de Dublín, fue encomendada para viajar a la nación asiática y convertirse en directora de Mercadotecnia e Innovación Digital en la Universidad Princesa Nourah Bint Abdulrahman: la institución saudí con la matrícula más grande sólo para mujeres.
Desde aquel país, la mexicana funge como asesora de las universitarias en el uso de tecnología y en el desarrollo de negocios de alto impacto: “Estamos reestructurando nuestra vida social y nuestra política económica. El país está buscando ser un punto de desarrollo de talento tecnológico”, indica.
Artemisa visitó el estado por medio de la organización Nodo Aguascalientes, esto con la intención de difundir las prácticas que Arabia Saudita está realizando para empoderar a su sociedad a través del conocimiento. “La economía de este país está transformándose gracias a los negocios digitales. Queremos trasladar cómo puede ser replanteado un modelo de negocio con la innovación”.
El principal reto al que se enfrenta Artemisa en el país de Asia Occidental es a cambiar la percepción que se tiene sobre la cultura mexicana: “Es una gran responsabilidad reposicionar la imagen de México allá. Hemos sido vendidos al extranjero a través de las series de Netflix que promueven el narcotráfico, la violencia y la inseguridad. Pero somos más que eso”.
Pese a esto, la guerrerense considera que México y Arabia Saudita tienen grandes oportunidades de cooperación, aunque no desde el enfoque de las inversiones, sino más orientada al intercambio de productos y servicios: “La seguridad es un factor que impide que el inversionista árabe se atreva a aportar su capital en México. Sin embargo, podemos colaborar en capacitación, comercio e intercambio académico”…