Por cuarta quincena consecutiva, la inflación de 2016 se encontró por encima del 3.0% dando un salto en la tasa anual del 3.04% estimado en la segunda quincena de octubre de este año al 3.29% en la primera parte del mes de noviembre 2016. Esta tasa anual sería el registro quincenal más alto desde la segunda quincena de marzo 2015, en donde se alcanzó el 3.30%.
Durante este período se dio también la elección del ahora presidente republicano de Estados Unidos, Donald Trump, por lo que este hecho podría ser otro de los factores relacionados con este índice. Sin embargo, de acuerdo a lo establecido por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el aumento en tarifas eléctricas fue el punto principal que ocasionó este índice inflacionario.
A inicios de noviembre, la Comisión Federal de Electricidad estimó que las tarifas eléctricas del sector industrial, comercial y de uso doméstico aumentarían debido a los incrementos de los precios de combustibles. Sector industrial incrementaría entre 5.6% y 7.2% sus costos en tarifa mientras que el sector comercial se toparía con una cifra de entre 3.3% y 5%; en el caso del servicio de uso doméstico, este se situaría en el 3.3% encima de su tarifa habitual.
Con esto, el sector industrial se encontraría con un incremento anual de entre 25 y 30 por ciento en comparación con noviembre de 2015; sector comercial se elevaría entre 17 y 23 por ciento respecto al año pasado y la tarifa de uso doméstico de alto consumo habría subido 17 por ciento respecto a la misma fecha.
De esta forma, el Índice Nacional de Precios al Consumidor, presentó un alza del 0.77 por ciento, que es catalogada como la cifra más alta durante el período presidencial de Enrique Peña Nieto desde noviembre 2013 (.85%). Por su parte, el índice de precios subyacente se elevó en 0.23%, encontrando una variación anual de 3.33%, mientras que el no subyacente se expuso en un aumento quincenal de 2.47% con una tasa anual de 3.18%.
Esta cifra rebasó la expectativa construida por diversos analistas, quienes esperaban una tasa anual de 3.15%. A pesar de que servicios como salud, alimentos, educación y transporte recibieron aumentos anuales de entre el 4 y 5 por ciento respectivamente, los servicios en comunicaciones redujeron aproximadamente en un 9 por ciento.