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¿La energía renovable es cara?

Por Juan Manuel Ávila, Director y cofundador de Top Energy México

Uno de los grandes mitos en el uso de energía renovable es su costo. Durante muchos años, varios actores fueron muy incisivos en este tema y como muestra sólo hay que retroceder cinco años atrás, cuando se aprobó la Ley de Transición Energética en 2015. Un año en el que varias cámaras industriales mostraron su desacuerdo derivado de la popular creencia de los sobrecostos que generaría esta ley en el precio de la energía.

El tiempo probó la falsedad de dicha premisa… La energía renovable no es sólo una macro tendencia, sino una opción más viable y económica que fuentes tradicionales como las fósiles. Y no estamos hablando de Gas Natural que no sólo es económico y menos contaminante, sino del enfrascamiento de la administración federal por basar la producción energética en dos fuentes en concreto: combustóleo y carbón.

Es por ello que hemos visto una reducción considerable en el precio de la energía desde el tercer trimestre de 2018, lo cual no tiene que ver con la nueva administración sino con las inversiones que se hicieron a través de las tres subastas eléctricas del gobierno federal anterior y que llevaron el precio de la energía a 300 pesos por Megawatt/hora.

Esto, estimado lector, significa que la CFE está comprando la energía a un precio 75% más barato que al que la vende a los usuarios finales. Es decir, le da viabilidad financiera para toda la cadena de suministro de la paraestatal.

Sin embargo, el camino escogido por esta administración es el de forzar la compra de energía mucho más cara, incluso que el precio que usted y yo pagamos por ella. ¿Cómo funciona esto? A continuación le describo un ejemplo:

Si la CFE compra la energía a $300 pesos el megawatt/hora y lo vende a una PyME en $3,450, le da margen para pagar las tarifas reguladas de Transmisión y Distribución, los cargos asociados al CENACE (Centro Nacional de Control de Energía), entre otros gastos, además de obtener un margen de ganancia.

¿Pero qué pasa si la misma CFE se compra la energía a $2,500 pesos el megawatt hora y lo vende a $3,450? Podríamos pensar que sigue teniendo margen pero hay que tomar en cuenta el costo de transportar la energía hasta el consumidor, los cargos asociados con despacharla, entre otros. Es por ello que la misma CFE pierde competitividad si se cierra al mercado.

Querer pelear contra las fuerzas de la gravedad claramente es ilógico, lo mismo es hacerlo contra una macrotendencia como lo es la energía renovable, que no sólo es la ruta que está siguiendo todo el mundo, sino que además es económicamente más viable que seguir por la ruta en la que estamos. Y sobre todo, que es más viable para los usuarios, para los generadores, para México y para la misma CFE.

Y tú, ¿ya inviertes en energías renovables? En Top Energy puedes cotizar y consultar más información en caso de que lo requieras. Si deseas ponerte en contacto con nosotros puedes visitarnos en este enlace.

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