En el diverso tejido de la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, Jorge Franz se erige como un líder visionario y catalizador del desarrollo. Él es el actual vicepresidente senior de turismo e industria y relaciones industriales de Houston.
Nacido en Santiago de Chile, su pasión por trabajar por las relaciones internacionales le fue inculcada por su padre, quien trabajó en la embajada americana. Por desgracia, toda su familia tuvo que emigrar un año años antes de la dictadura de Pinochet.
Después de radicar en diferentes países, llegó a Estados Unidos a la edad de once años, específicamente a Houston, donde pronto tuvo que valerse por sí mismo al terminar el high school.
“Para mí la decisión más fuerte vino después: yo tuve que aprender cómo ser adulto bien rapidito. Cuando terminé high school, mis padres decidieron irse a vivir a España, pero yo decidí quedarme aquí”, recuerda.
Jorge Franz estudió Comunicaciones Masivas y tiempo después obtuvo trabajo en Time Warner Cable —la compañía televisiva más grande del mundo en la década de los 90—. Señala que su origen latino fue, probablemente, el factor que lo catapultó al éxito; pues entonces las compañías buscaban profesionales hispanohablantes.
“Las oportunidades realmente se me abrieron mucho, más que nada porque hablaba español y porque soy una persona que entiende culturas diferentes, algo que se necesita muchísimo”, argumenta.
Tras una labor exitosa en la televisora, fue contratado por el Departamento de Turismo de Houston, mismo que requería una persona dedicada a la promoción de la industria y con conocimientos en medios masivos. Aunque comenzó como especialista en relaciones públicas, desde 2001 ha jugado un papel crucial en la transformación de Houston en un destino turístico multifacético.
Fail Fast, la adopción del cambio
En su papel como vicepresidente de Turismo en Houston, su visión de liderazgo radica en la comunicación efectiva y la confianza en su equipo. Su enfoque es claro: fomentar la autonomía y la confianza en sus colaboradores, permitiendo que cada miembro destaque en lo que mejor sabe hacer. Dicha filosofía se traduce en una combinación de liderazgo efectivo y respeto por la diversidad tanto de habilidades como de perspectivas.
“Para tener un liderazgo efectivo, hay que tener buena comunicación con las personas que trabajan contigo[…] Uno debe contar con gente que sabe lo que está haciendo y tener confianza en que ellos saben lo que están haciendo[…] Hay que mantener la mente abierta, oír a la gente y después también empujar para que también te sigan.
A veces, simplemente hay que empujar a los empleados a que te digan si hay un problema, porque muchas veces la gente esconde problemas, pero así no se soluciona nada, al contrario[…] ‘Fail Fast’ significa que está bien que cometas un error, pero hazlo rápido; y, cuando cometas el error, hay que entenderlo para solucionarlo”, afirma.
Franz está convencido de que su éxito proviene de su habilidad de siempre estar dispuesto al cambio y de aprender de errores rápidamente.
Por ejemplo, recuerda que, mientras la mayoría de los destinos de Estados Unidos aún enfocaba sus esfuerzos de venta en México en agencias de viaje y operadores turísticos, él ágilmente lanzó una de las primeras páginas de internet enteramente en español para una de las grandes ciudades estadounidenses, llamada holahouston.com, para comunicarse directamente con el consumidor mexicano.
En los últimos diez años, el sitio ha crecido exponencialmente y es ahora la fuente principal de información para los 1.7 millones de viajeros anuales procedentes de México.
“No te puedes tomar las cosas muy personales. Esto es business. Mucha gente ve al trabajo como una cosa finita, que acabas, fracasas, o terminas un horario y, ¡listo! Pero los trabajos tratan de manejar el cambio constantemente. Eso te deja con la idea que nunca has terminado. Si no puedes aceptar el cambio constante, es muy difícil seguir adelante”, explica.
Houston, hotspot del mundo
Adoptando esta filosofía del fail fast, Franz ha creado un entorno donde los desafíos se convierten en oportunidades de aprendizaje. Bajo esta premisa, ha dirigido iniciativas estratégicas que han redefinido la percepción de Houston como destino turístico.
Señala que el desarrollo de la ciudad ha colaborado a posicionar su percepción ante los visitantes de todo el mundo. En el caso del mercado mexicano, se ha expandido hábilmente a aspectos de renombre en ramas culturales, deportivas, cinematográficas y médicas.
Hoy esta metrópoli texana tiene vuelos a más de 180 ciudades en todo el mundo. El año pasado recibió a más de 1.8 millones de mexicanos, quienes dejan una derrama económica tres veces mayor a los americanos que visitan Houston.
“Para hacer promoción de un destino necesitas a todo el destino trabajando contigo. Es un equipo. Yo veo como mi parte educar y mantener a un grupo de gente muy diversa enfocada en una dirección[…] Me gustaría que Houston, eventualmente, se convierta en la ciudad más visitada de los Estados Unidos. Para eso necesita pasar mucho; para eso se necesita desarrollar toda la ciudad”, concluye.