La Mtra. Ana Lucía Reinoso Domenzáin, profesora de la Escuela de Pedagogía y Psicología nos comparte su opinión sobre la importancia del pedagogo dentro del sistema educativo y cómo es un elemento que puede ser un factor de cambio para la innovación educativa.
La maestra Ana Lucía Reinoso estudió la licenciatura de Pedagogía en la Universidad Panamericana campus Aguascalientes y, posteriormente cursó el Máster de Intervención Educativa y Psicológica en la Universidad de Navarra. Actualmente, se encuentra estudiando la Licenciatura en Psicología en la Universidad Latinoamericana.
Cuenta con amplia experiencia en centros educativos dentro y fuera del país en el área de docencia, intervención y orientación educativa y psicológica, y coordinación de equipos. Algunos colegios en los que ha colaborado recientemente son Bosques International School, Cumbres International School, Colegio Triana, y Colegio Miravalles. Este último en Pamplona, España.
Ha tenido la oportunidad de colaborar con empresas e instituciones internacionalmente reconocidas como Walt Disney World, la Clínica de la Universidad de Navarra y Knotion (Knowledge in Action).
Así mismo, ha estado a la cabeza de diversos proyectos educativos encaminados a la trascendencia de la formación integral de estudiantes de nivel primaria, secundaria y bachillerato.
Actualmente es parte del cuerpo docente de la Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales en temas de Liderazgo, Recursos Humanos y Manejo de Conflictos y Jefa de las carreras de Pedagogía y Psicopedagogía, así como docente de la Escuela de Pedagogía y Psicología en licenciaturas y posgrados.
¿Quién es el pedagogo y cuál es su rol en la sociedad actual?
El pedagogo es la persona que intenciona de manera pertinente y creativa, el proceso de aprendizaje en distintos campos: la institución educativa, la familia, la empresa y la sociedad en general. De esta manera, busca potencializar los talentos de las personas que participan en los distintos campos para que alcancen un desarrollo óptimo que los lleve a su mejor versión.
Partiendo de esta premisa y de la necesidad de actualizarnos constantemente y atender a las demandas reales de nuestra sociedad, los pedagogos hemos ido trazando nuestro camino de profesionalización, adaptando las nuevas tecnologías dentro de nuestra práctica.
Es por esto que la innovación educativa es un factor esencial dentro del ejercicio de cualquier formador, pues nos brinda herramientas y recursos que nos permiten estar a la vanguardia y ofrecer estrategias y programas que, no solo sean atractivos, sino también, que sean propuestas de valor que no pierdan de vista a la persona como el centro del proceso.
Es importante comprender que cuando hablamos de innovación educativa, hablamos de una capacitación constante en temas como tecnología, conocimiento y procesos. Esto debe ser un indicador de que, todos en conjunto, velamos por la integridad y desarrollo óptimo de cada persona.
La tecnología, aunque brinda muchos elementos de apoyo a nuestros procesos, nunca podrá tomar el lugar del pedagogo, pues la figura de esta persona que funge como una guía, siempre tendrá un toque profesional de acompañamiento que no podrá reemplazarse por ningún tipo de conocimiento, recurso o teoría.
La innovación educativa es una aliada más del pedagogo y tiene que entenderse como eso, como un factor que viene a agregar valor al proceso educativo más importante en la vida de cualquier persona: su formación integral.
