Un reporte de la Fintech mexicana Konfío, evidencia que la industria restaurantera ha sido una de las más golpeadas por la contingencia sanitaria del COVID-19 y las medidas de distanciamiento social para frenar la velocidad de contagio. Estima que los ingresos del mercado han caído en promedio 60% a nivel nacional, aunque existen casos de negocios que han tenido pérdidas de hasta el 300%. Esto ha provocado que muchas empresas recorten sus gastos a un promedio del 50%, lo que representa afectaciones a toda la cadena de suministros.
El informe, llamado “Impacto del Coronavirus en el sector restaurantero” indica que a pesar de ver números positivos durante enero frente a los 2 años anteriores, desde mediados de febrero los ingresos del sector comenzaron a disminuir. Con la llegada de la contingencia por la pandemia, las ventas se desplomaron, llegando a una caída del 40% sólo en la última semana de marzo.
Incluso antes de comenzar las medidas de contingencia y aislamiento social, dice el estudio, los restauranteros ya sufrían de los primeros efectos de la pandemia con elevados precios de insumos importados.
El reporte de Google “Mobility Changes” realizado para México, señala que sólo durante marzo las tendencias de movilidad para lugares como restaurantes, cafeterías y centros comerciales decreció 45%.
Los especialistas de Konfío mencionan que existen dos elementos clave que se deben considerar para resistir las semanas por venir de la contingencia:
- Garantizar su liquidez: Considerado como el elemento esencial para mantener la operación del negocio. Su objetivo en este momento no debe ser el crecimiento, como sería habitual, sino proteger el negocio y su operatividad.
- Repensar el modelo de negocio: La gran enseñanza de esta contingencia es que los nuevos negocios no pueden seguir dependiendo al 100% de la ocupación de mesas y aforo a sucursales. Por ello, es necesario pensar en nuevas estrategias y un modelo de negocio más flexible.
De acuerdo con Konfío, los pequeños y medianos empresarios del sector restaurantero están tomando 3 medidas principales para reinventarse y permanecer vigentes:
- Bonos gastronómicos: Se trata de pagos únicos por un monto fijo, que los clientes pueden cobrar en el momento cuando los negocios vuelvan a abrir sus puertas. Los recursos obtenidos por estos bonos se destinan a la subsistencia del negocio mientras se reactiva.
- Dark Kitchen: Se trata de un modelo que vio un crecimiento interesante incluso antes de la contingencia. El objetivo es cambiar el modelo a un restaurante sin mesas ni sillas, sólo con servicio de delivery. Representa un gran ahorro de gastos en renta, inmobiliario y mantenimiento, con el añadido de tener una gran capacidad de expansión.
- Venta Delivery: Utilizando servicios como Rappi, Uber Eats, Sin Delantal y otros, los negocios pueden abarcar zonas más extensas y llegar a otros públicos. En 2018 este modelo registró ventas por 1,043 millones de dólares y se espera que al 2023 llegue a 2,459 millones de dólares, de acuerdo con Statista.