El INEGI dio a conocer que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró en la primera quincena de abril un incremento de 6.05% en su comparación anual, la inflación más alta desde la segunda quincena de diciembre del 2017 cuando reportó un crecimiento de 6.85%.
La inflación interanual reportada en la primera mitad de abril fue impulsada por un alza en los precios de los combustibles, según arrojan la información publicada por el instituto.
El Índice de Precios Subyacente, aquel que elimina los bienes y servicios cuyos precios son más volátiles, reportó un incremento de 4.13% anual; al interior, los alimentos, bebidas y tabaco mostraron un incremento de 5.96%, mientras las mercancías un aumento de 5.66%.
En tanto el índice de precios no subyacente observó un incremento de 12.21% en comparación con el mismo periodo del año anterior. En su interior, los energéticos reflejaron un crecimiento de 28.22%. Le siguieron los Energéticos y Tarifas Autorizadas por el Gobierno, con un aumento de 19.42% y los bienes pecuarios, con un aumento de 9.42%.
Los productos que mostraron un mayor incremento en sus precios respecto a la quincena previa fueron el chile serrano (25.13%), el jitomate (18.84%), el aguacate (15.74%), otros chiles frescos (10.19%) y el tomate verde (7.36%). Otros productos que observaron un incremento son las loncherías, torterías y taquerías; la tortilla de maíz; el pollo; los automóviles; y la vivienda propia.
Por el contrario, los productos que mostraron una mayor deflación en sus precios con relación al periodo inmediato anterior son la electricidad (-12.03%); la papa y otros tubérculos (-8.88%); servicios turísticos en paquete (-7.20%); el chayote (-5.32%).
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