El INEGI reveló que en el mes de julio el Índice Nacional de Precios al Consumidor creció en su tasa anual 3.62%, el mayor nivel en cinco meses cuando en febrero la inflación se situó en 3.7%.
La inflación estuvo motivada por el alza en los precios de la papa y otros tubérculos, la gasolina de bajo octanaje, el pollo, la gasolina de alto octanaje y el frijol.
Con relación al índice de precios subyacente, aquel que excluye a los productos con mayor volatilidad en sus precios, se observó un incremento de 0.40% mensual y 3.85 por ciento anual; en tanto el índice de precios no subyacente vio una aceleración de 1.48% mensual y 2.92% anual.
Al interior del índice de precios subyacente, el precio de las mercancías, los alimentos, bebidas y tabaco así como los servicios fueron los elementos que tuvieron una mayor incidencia en el crecimiento de la inflación anual.
Por el contrario, detrás del índice de precios no subyacente los productos agropecuarios, pecuarios, las frutas y las verduras, y los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno se ubicaron como los componentes que observaron una mayor incidencia en la inflación anual.
Los productos que mostraron un mayor encarecimiento en sus precios son las papas y otros tubérculos (6.61%) gasolinas de bajo y alto octanaje (5.64% y 5.26%), el pollo (5.60%) y el frijol (3.60%). En contraste, aquellos productos con precios a la baja son el chile serrano con una deflación de (-)29.20%, la uva (-) 29.25%, el chayote (-)24.07%, entre otros.
Las ciudades que registraron una mayor inflación en sus precios son Tuxtla Gutiérrez, Chiapas (1.37%); Tijuana, Baja California (1.14%); Hermosillo, Sonora (1.13%); Saltillo, Coahuila (1.10%) y Ciudad Juárez, Chihuahua (1.09%). Aguascalientes se ubicó en la octava posición con un incremento de 1.00%.
Por el contrario, aquellas ciudades que mostraron una variación por debajo de la nacional son Izúcar de Matamoros, Puebla; Tehuantepec, Oaxaca; Coatzacoalcos, Veracruz; León, Guanajuato; y Acapulco, Guerrero.