Casi 30 modelos a diesel de Mercedes-Benz, BMW, Chrysler, General Motors y Land Rover están bajo investigación de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA) de Estados Unidos, como parte de un operativo para detectar otros casos de adulteraciones a las pruebas de emisiones como la que se descubrió en Volkswagen.
Un reporte de Financial Times citado por El Financiero dio a conocer que la EPA realiza una búsqueda de dispositivos o software para manipular las emisiones contaminantes de los vehículos “para determinar si Volkswagen actuó sola en la adulteración de pruebas de emisión o si la práctica es más generalizada en la industria”.
La decisión es parte del endurecimiento de medidas que la Agencia se ha visto obligada a tomar desde finales del mes pasado, cuando quedó al descubierto la trampa que instaló la automotriz alemana en diversos modelos de sus líneas VW, Audi, Seat y Skoda.
Mientras tanto, la planta que esa automotriz tiene instalada en la ciudad de Puebla anunció hace unas horas que suspenderá las jornadas laborales de los sábados, aunque aseguró que su producción no se verá afectada.
Además, Volkswagen puso en línea una página de internet que permitirá a los usuarios saber si poseen uno de los 11 millones de vehículos con motor de diesel trucado, informó el diario mexicano El Economista.
Desde que estalló la noticia, otros países como Francia, Suiza y Rumania han tomado medidas como la investigación o la suspensión de importaciones de vehículos de la marca a sus países. El fraude, se calcula, devaluará todos los vehículos de VW entre 3 y 8 por ciento. Con todo, la automotriz reportó un alza en ventas durante septiembre.