El director de prestaciones médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a nivel nacional, Víctor Hugo Borja Aburto, señaló que la institución médica está preparada para enfrentar el coronavirus, haciendo énfasis en que hay una coordinación total con la Secretaría de Salud Federal.
“La coordinación entre las instituciones de seguridad social y el resto del sector salud es permanente; ésta ha permitido transitar más fácilmente para la preparación en el COVID, porque hemos tenido una coordinación previa para muchas de los otros temas relacionados con la atención de la salud de todos los mexicanos”, señaló en conferencia de prensa, además de puntualizar que la coordinación se da en tres fases: marcos de actuación, diagnósticos y fases de prueba.
Sobre la capacidad que tendrían las instituciones médicas para atender posibles casos de la enfermedad, refirió que puede ser suficiente o insuficiente dependiendo de la temporalidad o la extensión con que haya una afectación.
“También estamos preparados con la red de epidemiología al interior del IMSS, de manera coordinada con la Dirección General de Epidemiología, las redes de laboratorio que tenemos y los centros. Ya el INDRE ha dado una capacitación a los laboratorios de vigilancia epidemiológica del IMSS y estamos preparados para hacer las determinaciones en el momento que se requieran. Todo esto coordinado por el INDRE”, explicó.
Agregó que también han hecho estimaciones sobre cuál es la capacidad que se requeriría para brindar atención médica, para entonces determinar a cuánto ascendería el número de pacientes que podrían infectarse.
“Si el IMSS debe de atender a 64 millones de derechohabientes, entre el régimen ordinario y el IMSS BIENESTAR, entonces eso nos da una magnitud, pero si fuéramos pesimistas y nos fuéramos al 0.5 por ciento de tasa de ataque, obviamente estas tasas de ataque no son homogéneas en todo el país, puede haber unas ciudades más afectadas que otras. Pero si hiciéramos los cálculos para todos los derechohabientes del IMSS, entonces pensaríamos en que podríamos tener, con una tasa de ataque del 0.5, como 300 mil derechohabientes que se infectarán”, dijo.
Agregó que esto no quiere decir que todos van a desarrollar la enfermedad sintomática ni que todos van a ser enfermos graves, de tal manera que pudieran tener 3 mil derechohabientes que requerirían estar en ventilador.
“Estos 3 mil esperamos que se den en el transcurso de los meses y en distintos hospitales, en distintos lugares. De tal manera que eso nos permite ver cuáles son nuestras capacidades en el IMSS y hemos hecho los cálculos para esto, preparándonos para ver si podemos atender a todos. Hemos calculado también los días de estancia, no es lo mismo que un paciente se quede un mes, a que se quede cinco días”, explicó.
Asimismo, el galeno comentó que en los últimos tres meses han adquirido cerca de 900 respiradores o ventiladores para la atención médica regular, lo que aumentó su capacidad en esta época de influenza.
Añadió que en el IMSS tienen cerca de 8 mil 506 camas de urgencias en el país, más de 4 mil ventiladores y se han estado preparando con equipos de protección personal.
De igual modo, dijo que es muy importante que el equipo de salud esté preparado para dar la atención y utilice, correctamente, el equipo de protección personal, además de referir que seguirán atendiendo los lineamientos de vigilancia epidemiológica, que han ido cambiando de manera paulatina, conforme a la aparición de casos.