“La innovación es la generación de iniciativas que prevalecen, es decir, que no quedan en el aire, que logran su objetivo, que no son temporales y que cambian para siempre las cosas”, es el concepto que resume en exclusiva para Líder Empresarial el Dr. Guillermo Aguirre, fundador de Innovalia y socio fundador del Consejo de Líderes en Innovación y Tecnología (CONACYT), Qurio Group.
La pasión del Dr. Aguirre por la innovación se hace notar en sus respuestas, en las que describe con entusiasmo cada caso de éxito que ha impulsado al guiar a cada persona en sus procesos de innovación por medio de programas y procesos que promueven nuevas iniciativas y logran que estas prevalezcan.
“Hemos realizado procesos grupales con empresas para llevarlas a varios niveles de innovación, que tiene que ver con interiorizarse con las técnicas y metodologías de innovación, así como llevar proyectos adelante”, señala el Dr. Aguirre.
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El exdirector de tecnología de Grupo Vitro agrega que para lograr una disrupción en la manera de pensar de sus clientes, realizan viajes a ciudades de innovación (como Shanghái, Boston, Silicon Valley, entre otras) para que se tracen metas cada vez más altas, pero entendiendo que son 100% tangibles.
Los innovadores aprenden a pensar en X
Aguirre explica que el resultado que se obtiene en su acompañamiento es que las personas aprenden que la innovación tiene siempre un resultado en X, es decir las veces que crece el negocio.
“Quienes han participado en nuestros programas nos retroalimentan que el mayor aprendizaje que obtienen es el pensamiento en X, acostumbrarse a pensar en X y esperar X”, afirma.
Aunado a ello, la mente del emprendedor cambia para empujar sus proyectos de innovación, quitarse barreras, y proponer constantemente metas tangibles.
“Mucho de los que nosotros promovemos en nuestros proyectos de innovación es la capacidad que tiene el ser humano de anticipar para lograr que las cosas ocurran como se espera”, puntualiza.
Una idea que se convierte en éxito
Guillermo Aguirre comentó sobre un proyecto de innovación que causó un gran impacto positivo, y que muestra que el poder de innovar está dentro de cada persona. Se originó por iniciativa del ingeniero Miguel Pérez Gómez, rector de la Universidad Anáhuac Mayab, y su objetivo era llevar a los mil 100 alumnos de nuevo ingreso a crear un negocio de innovación.
Tras darles una breve introducción sobre el tema, estos debían llevarlo a cabo en solo tres días, es decir, idearlo, producirlo y venderlo en este lapso. Cabe destacar que para poder realizar el proyecto, la institución educativa le dio dos mil 500 pesos a cada equipo de cinco alumnos.
Como era de esperarse parte del alumnado devolvió el dinero porque no logró imaginar un negocio viable; no obstante, el 15% cuadriplicó su inversión en esos tres días.
“La estudiante que ganó el primer lugar logró generar ventas por $70 mil pesos. Inventó un nuevo producto para el pelo, basado en una receta de su abuela y cuyos beneficios mostraba la propia alumna”, explica el socio fundador de Qurio.