El significado del liderazgo ha tomado gran relevancia en las cabezas de las empresas durante los últimos años. Hoy en día, los colaboradores buscan más que nunca sentirse valorados y reconocidos en su trabajo. Como bien señala Larry Page, cofundador de Google: «Mi trabajo como líder es asegurarme de que todos en la compañía tengan grandes oportunidades y que sientan que están teniendo un impacto significativo».
Por lo anterior, las compañías buscan certificados que respalden el trabajo de sus líderes y que aseguren que su empresa es un buen lugar para laborar, como el que brinda Great Place To Work® (GPTW).
En México, dicha organización es liderada por una persona con amplia experiencia en implementar una cultura organizacional ejemplar: su CEO, Alma Rosa García Puig.
“[Al obtener las empresas su certificado como un ‘Buen Lugar Para Trabajar’] su rentabilidad mejora, su rotación disminuye en más del 50% y el compromiso de sus empleados aumenta”, asegura García Puig.
La líder de GPTW en el país tiene una amplia trayectoria laboral, respaldada por su formación académica. Alma es licenciada en Administración de Empresas por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). Además, en la Universidad de Texas obtuvo una maestría en Negocios (MBA) y otra en Programación Neurolingüística en el Instituto Mexicano de PNL.
Asimismo, García Puig fue directora general en Latinoamérica de Grupo Cinemex, directora general adjunta de Tiendas 3B, directora general de Alta Retail, directora de Franquicias en Circle K México y directora general de Cielito Querido Café.
La CEO de GPTW en el país, que asumió dicho cargo en noviembre de 2020, refiere en exclusiva a Líder Empresarial que trabajar por un México mejor es uno de los principales objetivos de la organización.
“Creo que eso trato de inculcar siempre en mi equipo. Hacer las cosas con cariño y con pasión para que, con nuestro granito de arena, México salga adelante”, expresa Alma Rosa.
Aunado a ello, García espera, en un corto plazo, ayudar a las organizaciones a transformar su cultura organizacional en medio de la pandemia que se vive en la actualidad a causa del COVID-19.
A mediano plazo, la líder augura sacar hacia adelante tanto innovación como nuevos productos desde el organismo, mismos que permitan acompañar a las empresas hacia el conocimiento de los nuevos estilos de liderazgos que “se necesitan en el mundo”.
“Si la pandemia algo nos enseñó, es que muchos paradigmas se rompieron, pero aparte sí cambiaron los estilos de liderazgo con los cuales tenemos que medir a las organizaciones y con los cuales tenemos que conducirlas (…) para que el liderazgo del mundo empiece a cambiar a uno más centrado en la persona, más empático, más humano y sobre todo mucho más flexible”, concluye Alma.