De acuerdo a la consultora IDC, 31% de empresas mexicanas moviliza hasta un 51% de sus empleados a la metodología “Home Office” pues al no perder tiempo y dinero a través de los traslados desde el hogar al centro de trabajo los trabajadores se mantienen motivados y aumentan su productividad, eficiencia y calidad de servicio.
La movilidad empresarial, el teletrabajo o el home office, es aquella que permite el desarrollo de las compañías desde cualquier lugar sin mucha complejidad, y no es exclusiva de las grandes empresas, ya que brinda múltiples beneficios, como la reducción de costos tanto a las PyMES como empresas transnacionales y hasta el gobierno de la Ciudad de México.
Este último implementó la estrategia “home office” desde el pasado 23 de mayo y ahora 782 personas de 72 dependencias pueden realizar sus labores desde casa sin mayor complejidad.
Otro ejemplo, es Automattic, compañía dueña de WordPress, quien se deshizo de sus oficinas en San Francisco. Y no por crisis o por la burbuja inmobiliaria, sino por el auge del teletrabajo que provocó que casi la totalidad de sus 550 empleados trabajen desde casa y las oficinas estén prácticamente vacías. Solo 5 empleados acudían a trabajar.
Esta tendencia laboral evoluciona a la par de la fuerza de la globalización, una mayor adopción de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y nuevos patrones productivos, entre otros aspectos. Actualmente se han identificado tres modalidades:
Teletrabajo Autónomo: Trabajadores independientes o empleados que se valen de las TICs para realizar sus tareas desde cualquier lugar elegido por ellos.
Teletrabajo Suplementario: Tienen contrato con la empresa, pero alternan sus labores entre la oficina y un lugar donde ellos decidan, usan las TICs para realizar su trabajo.
Teletrabajo Móvil: Están ausentes de la oficina la mayor parte del tiempo, completan sus tareas con diferentes dispositivos móviles, no tienen un lugar exacto para ejecutar sus labores.
Según la Coparmex (Confederación Patronal de la República Mexicana), la movilidad empresarial incrementa hasta en un 28% la productividad al eliminar tiempos de traslado que, en ciudades como la de México, alcanzan hasta las 5 horas al día.