La planta armadora de General Motors en San Luis Potosí seguirá sin operar hasta mediados de marzo debido al desabasto de semiconductores que prevalece en la industria automotriz.
Las fabricas Fairfax de Kansas City, en Estados Unidos y CAMI de Ontario, Canadá también detendrán su producción hasta marzo, informó General Motors.
El plan de GM es aprovechar todos los semiconductores disponibles para el armado y envío de los vehículos más populares y de mayor demanda como el Chevrolet Corvette y los vehículos utilitarios deportivos (SUV) de tamaño completo.
“La organización de nuestra cadena de suministro está trabajando en estrecha colaboración con nuestra base de suministro para encontrar soluciones para los requisitos de semiconductores de nuestros proveedores y mitigar los impactos en GM”, señaló la empresa mediante una comunicado.
El fabricante también indicó que recuperaría la mayor cantidad de producción perdida en estas plantas. Cuando hay escasez de semiconductores que impacta en la producción como es el caso, GM desarrolla vehículos sin ciertos módulos para complementarlos lo antes posible, agregó.
La anterior permite satisfacer con mayor velocidad la demanda de los clientes a medida que haya más semiconductores disponibles.
“Trabajaremos a través de esta situación y no cambiaremos el sólido desempeño subyacente de la empresa, nuestra agenda de crecimiento o nuestro compromiso con un futuro totalmente eléctrico”, respondió la empresa.
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