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Ganadores y perdedores del nearshoring

Foto de CHUTTERSNAP en Unsplash en https://unsplash.com/es/fotos/foto-aerea-de-la-pila-de-remolque-cerrado-kyCNGGKCvyw

La economía mexicana ha depositado altas expectativas en el fenómeno de la relocalización, también conocido como nearshoring, pues podría implicar una oportunidad de crecimiento y dinamismo para el país. Sin embargo, en esta apuesta, no todos los estados de México podrían resultar beneficiados, ¿cuáles serán los ganadores del nearshoring? 

De acuerdo con el informe de Banorte, “Zoom Nearshoring”, publicado en marzo del 2023, la reubicación de las cadenas de producción a lugares más cercanos a los centros de consumo plantea una oportunidad para que México continúe desarrollando clústeres industriales, impulse el crecimiento de las exportaciones de bienes y provea más servicios a varios países.  

Según la estimación de Banorte, México podría obtener ganancias cercanas a 168 mil millones de dólares en exportaciones durante los próximos cinco años, lo que correspondería únicamente al nearshoring. 

Las principales exportaciones de México son de vehículos de pasajeros y transporte, autopartes, equipos de electrónica como computadoras, monitores y teléfonos, instrumental médico, e, incluso, muebles. 

En una segunda entrega, Banorte publicó en julio de ese año “Zoom Nearshoring II: la Fuerza de la Proximidad: Impacto Económico del Nearshoring desde un Enfoque Regional” en el cual evaluó el impacto de la relocalización sobre las entidades y consideró variables como el PIB potencial, el flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) y las exportaciones no petroleras.

No obstante, señala que, para capitalizarse, tendrá que implicar una mejora en la infraestructura, en la generación de energía eléctrica, el abasto de agua y la construcción de carreteras o puertos. A esto se unen el fomento de políticas públicas y privadas que incentiven la inversión, la mejora del Estado de Derecho, la competitividad y la formación de capital humano. 

Algunos sectores que podrían resultar más beneficiados, según Banorte, serán la agroindustria y el sector agropecuario; así como la industria química y de plásticos; la producción de ropa y accesorios; los metales básicos, seguido de la producción de maquinaria, en específico, la industria automotriz y aeroespacial; la producción de aparatos eléctricos y electrónicos; al igual que la elaboración de muebles. 

Nuevo León, potente prospecto

Una de las entidades que más podrían resultar beneficiadas de la relocalización es Nuevo León, que ocupa el cuarto lugar nacional en exportaciones no petroleras a Estados Unidos, pues participa con un 9.9%, según la recopilación de Banorte. 

Esta entidad también obtuvo el score más alto con una puntuación de 9.3 de Banorte —que evaluó elementos como el PIB potencial, la captación de IED y la infraestructura y logística—, para ponderar la importancia de estas variables sobre el potencial económico derivado del nearshoring. 

El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) posicionó a Nuevo León como el tercer estado más competitivo del país, al estar en el Top 5 en captación de IED, al igual que el mejor calificado en innovación. Según el score de Banorte, fue clasificado con un crecimiento potencial del PIB de 3.3. Junto con Querétaro, es considerada una de las cinco entidades más relevantes para el clúster aeroespacial. 

La industria automotriz también podría resultar beneficiada en Nuevo León con este fenómeno, pues Banorte indica que esta es una de las seis entidades con mayor participación en las plantas de producción y exportación de autopartes. 

Esto se aúna a la elaboración de muebles, pues es el tercer estado con mayor producción, mientras que Guanajuato está en los primeros ocho lugares de los principales exportadores de muebles.

La infraestructura y la logística también desempeñan un papel central en el potencial económico del nearshoring que podrían captar los estados, así lo reconoce Banorte, que analizó su impacto sobre la capacidad de exportación. La entidad mejor calificada fue Chihuahua con un score de 1.0; sin embargo, Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila y Baja California obtuvieron el segundo lugar con 0.8. 

El Bajío: atractivo para el nearshoring 

La región centro (integrada por Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes, San Luis Potosí y Zacatecas) también podría ser una de las principales receptoras de inversiones por nearshoring, pues ocupó el quinto lugar en captación de flujos de capital por IED durante el 2022, con un monto de tres mil 296.3 millones de dólares (mdd). 

En concreto, Banorte posiciona a Guanajuato, Aguascalientes y San Luis Potosí como las entidades que más captaron flujos significativos hacia el sector manufacturero. San Luis Potosí, al igual que Nuevo León, también podrían beneficiarse por la necesidad de metales básicos, pues ambas destacan en la producción de acero. San Luis Potosí también es de las primeras cuatro entidades en extracción de cobre. 

Guanajuato, específica Banorte, es de los principales exportadores de juguetes, por lo que también podría atraer inversiones en este rubro. Sin embargo, dicha entidad y San Luis Potosí enfrentan áreas de oportunidad, al estar clasificadas con una competitividad “media baja” por el IMCO. 

Aguascalientes tiene el séptimo lugar en competitividad, pero destaca en indicadores como el medio ambiente (tercer lugar nacional). Por tanto, tiene capacidad para relacionarse de manera sostenible y responsable con los recursos naturales y su entorno. Sin embargo, tiene el séptimo lugar en apertura internacional, el noveno en innovación, el 18 en mercado de trabajo y el 28 en economía. 

En contraparte, Querétaro también podría atraer inversiones importantes por el nearshoring, ello al haber sido clasificado en el segundo lugar nacional en competitividad, según el IMCO, al encabezar el subíndice de sistema de gobierno y estar en la segunda posición en innovación. 

 

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