Probablemente, a usted o a su familia les ha tocado el infortunio de vivir en la zozobra por las acosadoras, amedrentadoras y abusivas llamadas de los despachos de cobranza. Esas que se hacen en las horas más inapropiadas posibles y donde le profieren todo tipo de amenazas.
Bien, pues finalmente se empieza a regular este tipo de abusos que cometen los llamados despachos de cobranza, mismos que ahora tendrán un horario definido para hacer su tortuosa labor de cobrar. Ya no podrán hacerlo a altas horas de la noche, tampoco insistir cuando se les hace ver que el teléfono o domicilio de la persona cambió.
Lo anterior forma parte de una nueva regulación propuesta por la Condusef, y que ya es analizada en la Comisión Federal de Mejora Regulatoria. Tal vez es algo que debió hacerse hace mucho tiempo, pero más vale tarde que nunca.
Además de horarios establecidos de llamadas, los despachos de cobranza no podrán usar números privados. Como estos despachos regularmente trabajan con instituciones financieras, estas quedarán sujetas a una nueva normatividad apenas entren en vigor las nuevas disposiciones.
En principio, solo podrán marcar de las 8 de la mañana a las 10 de la noche. Para un mejor control, los bancos serán obligados a inscribirse en el nuevo Registro de Despachos de Cobranza.
Además las instituciones financieras deben indicar el nombre de los despachos con los que trabajan, así como los socios que conforman el despacho, el domicilio, número telefónico y nombre de las personas responsables de la cobranza.
También se prevé que deberán rendir un informe a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) de forma trimestral sobre las quejas recibidas, así como recibir y suscribir los acuerdos de pago, negociación o reestructuración de los créditos, préstamos o financiamientos a los que lleguen los despachos de cobranza con los deudores, una vez que se apruebe la nueva regulación para estas figuras.
También se propone imposibilitar las gestiones de cobro a terceros, incluidas las referencias personales y beneficiarios, con excepción de deudores solidarios o avales. Tampoco podrán amenazar o intimidar al deudor, sus familiares, compañeros de trabajo o cualquier otra persona que no tenga relación con la deuda.
El Banco de México había propuesto que, dada la facilidad que se tiene de cambiar de número telefónico, las personas podrían presentar quejas por llamadas de cobranza de un desconocido después de más de tres llamadas consecutivas, lo que no fue aceptado. Una vez aprobada la regulación, si una persona recibe una llamada para cobrarle la deuda de un tercero o un desconocido desde ese momento puede iniciar su procedimiento de queja.
Todas las entidades financieras que otorgan créditos, como bancos, sociedades financieras de objeto múltiple, sociedades financieras populares, las cooperativas de ahorro y préstamo, entre otras, van a estar reguladas cuando contraten despachos de cobranza para ejercer las acciones de cobro a sus deudores respectivos.