Por: Janette Rodríguez, embajadora de Great Place To Work®️ México y directora general DIA1
En la actualidad, las empresas familiares enfrentan diversos y complejos problemas que limitan su desarrollo, por lo que es importante visibilizarlos y estar preparados para una gestión adecuada de los negocios familiares.
Por ello la gobernanza tiene que ser una herramienta que aporte valor a las familias y a las empresas. Identificar algunos de los problemas más comunes de este tipo de organizaciones ayuda a entenderlos e identificar posibles soluciones.
Contar con un buen sistema de gobernanza significa tener bien definidos planes de sucesión y de actuación. La gobernanza aporta valor y contribuye a priorizar los temas de urgencia estratégica como el manejo de valores, planes de sucesión, reputación, atracción y retención del talento, entre otros.
La familia y la gobernanza
En este tipo de empresa, la influencia de la familia es de gran impacto. Por ello, es importante reconocer que son organizaciones emocionales. Esta naturaleza afectiva proviene de la dimensión familiar y debe ser canalizada adecuadamente.
En gran parte los conflictos que se viven en estas organizaciones son producto de situaciones de familia que no han sido resueltas correctamente. Estas situaciones pueden incluso paralizar literalmente a una empresa y enfrentar a sus miembros, que por lo general fungen como accionistas y/o directivos. Si ellos logran identificar el origen de su inconformidad y darle un buen tratamiento a la situación, será más sencillo alcanzar un mejor futuro.
Podría prácticamente asegurar que la causa número 1 de que estas empresas no lleguen a su expansión, en la mayoría de los casos, es la falta de una visión clara que les permita llegar a lo que denomino Calibración de propósito empresarial.
Para ello, existen algunas recomendaciones importantes, como trabajar de la mano de expertos (preferentemente externos a la jerarquía familiar) en 3 ejes o pilares que coadyuvaran al éxito de las estrategias del negocio.
1. Calibración de propósito empresarial
Tener un propósito claro proporciona a la empresa un sentido de dirección y significado; a su vez, ayuda a alinear tanto a sus directivos como a sus colaboradores, clientes y grupos de interés en torno a una visión y un objetivo comunes.
También puede proporcionar una poderosa ventaja competitiva, ayudando a diferenciar una empresa de sus pares y a construir una base de clientes fuerte y leal, e incluso generar un sentido de trascendencia.
2. Establecer un plan de negocios bien definido
Una vez que el propósito de la empresa ha sido definido y aprobado por los miembros del consejo o integrantes de la estructura familiar, es imprescindible contar con un plan de negocios por escrito con proyecciones financieras realistas que modelen qué hacer en caso de no obtener los recursos esperados.
No tener métricas claras e incluso no tomar en cuenta la capacitación son alguna de las principales causas que evitan que las empresas familiares no se vuelvan fructíferas.
3. Claridad
La claridad corporativa suele estar ausente dentro de estas empresas. No obstante, lo que más repercute en su desarrollo es no tener un organigrama bien establecido y, sobre todo, el evitar explicar con transparencia al familiar las funciones del puesto (sea hermano, cuñado, primo, etc.), así como su salario y prestaciones, que deberían estar bien delimitados.
Igualmente, es importante aplicar a todos los empleados un plan de negocios objetivo y honesto para trabajar en sus áreas de oportunidad y fortalecer las áreas que domina, sin importar que sea familiar o no.
Procesos de integración eficientes
Es sumamente importante que los procesos de integración de los familiares se hagan con la misma formalidad que si se contrata a alguien externo. Como en cualquier otro caso, deben valorarse las capacidades, las actitudes y los valores de los miembros de la familia quienes aspiran a ocupar un cargo y, de esta forma, estimar las aportaciones que pudieran hacer.
Lo anterior contribuirá a conseguir el tan anhelado balance familia-empresa ya que, al establecer los límites entre el ámbito familiar y el ámbito empresarial al momento de llegar a acuerdos y negociaciones. Debemos recordar que, si la empresa crece, todos los colaboradores lo harán también.
Es importante evitar las preferencias en las empresas familiares, y tener siempre las métricas y evaluaciones de cada uno bien establecidas.
Buena gobernanza, mejor relación familiar
Las familias que se resisten a implantar principios de buen gobierno pueden tender a ignorar las disrupciones que tienen lugar en el mercado o a minimizar su importancia. Lo anterior, puede provocar división en el seno familiar y disputa entre los miembros de la familia, más orientados a culparse unos a otros que a corregir los errores y tomar decisiones sin debatirlas lo suficiente, sin reflexionarlas y sin tener en cuenta puntos de vista objetivos.
El verdadero reto estas situaciones es encontrar un pensamiento crítico y objetivo. Además de no mezclar problemas familiares con lo empresariales o viceversa. De lo contrario, estos conflictos podrían ser desastrosos para tu institución.
Para solucionar esta problemática, es necesario contar con un excelente departamento de Capital Humano que se encargue de identificar las necesidades de la empresa, contribuya a la definición de procesos, así como posicione a los familiares en el puesto ideal, siempre que cuenten con la capacitación suficiente. De lo contrario, la empresa podría enfrentarse a otras problemáticas en un futuro.
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