Por: Mario Montañez, Banca Privada de Grupo Financiero Monex
A lo largo del año, la nueva dinámica de los negocios (y, en general, de la vida cotidiana) ha traído consigo diversos cambios: la forma de trabajo, reuniones, horarios, estilos de vida, por mencionar algunos; sin mencionar también el comportamiento mismo de la economía.
En este último rubro, ha modificado el desempeño financiero de algunas industrias en particular. Tal es el caso, por ejemplo, del sector exportador, el cual prácticamente ha sido en gran parte el sustento de la economía durante estos años complicados de pandemia.
De lo anterior cabe destacar que, en México, según estadísticas del Banco Mundial, cerca del 80% del Producto Interno Bruto (PIB) del sector exportador. En este, los más relevantes a nivel mundial son el sector automotriz y autopartes; electrónicos, maquinaria y equipo; agroindustria y petróleo; sin olvidar al sector de servicios de alto valor agregado como consultoría y/o desarrollo de productos intangibles. Lo anterior está soportado, principalmente, por más de once tratados de libre comercio -que han permitido el desarrollo de este sector en los últimos 30 años-.
No obstante, aunado a los retos y cambios que ha traído la coyuntura actual, gobiernos e industrias enteras se han visto obligadas a rediseñar sus estrategias de política pública, estrategia financiera y negocios ante retos complejos como los mencionados en ediciones anteriores: la inflación creciente, alza de tasas de interés, poca liquidez, entre otros.
Por lo anterior, el sector exportador nuevamente se ha beneficiado con diferentes fuentes de financiamiento y desarrollo de negocio existentes, como el factoraje internacional.
¿En qué consiste el factoraje internacional?
La empresa obtiene liquidez para capital de trabajo, a través de la cesión de sus facturas por cobrar con plazos de más de 30 días a un intermediario financiero. Cuenta con las siguientes características:
- Se evalúa al cliente y/o proveedor de la empresa exportadora directamente,
- Bajo costo de financiamiento ligado a tasa LIBOR,
- Otras garantías, como un seguro ante un posible impago de terceros,
Por ello, es una atractiva opción para negociar con proveedores internacionales los plazos de pago y a un costo competitivo -así como con aquellas entidades que no sean sujetas de crédito por sus compromisos financieros vigentes-.
Si tienes alguna situación particular como las descritas, acércate y conoce las distintas alternativas de la mano de los expertos de Grupo Financiero Monex. Ellos saben cómo hacer que tu dinero trabaje:
- Descontando sus cuentas por cobrar sin recurso (tu empresa transfiere el riesgo de crédito a Monex y adquiere liquidez).
- Descontando sus cuentas por cobrar con recurso (tu empresa sólo busca obtener liquidez).
- Facilitando el que sus proveedores le vendan a crédito por medio del factoraje pago a proveedores (inverse factoring).