Un análisis hecho por BBVA Research advierte de una posible afectación drástica a la economía mexicana en 2020 si el Gobierno Federal no adopta medidas más severas para contener la propagación del coronavirus COVID-19, señalando que es más peligrosa “la inacción” que la “sobrerreación”.
El reporte del corporativo financiero anticipa una contracción económica del 4.5% en el presente año, “con fuerte sesgo a la baja si se siguen postergando las medidas para frenar el contagio. Esta previsión se suma a la difundida por JP Morgan, consultora que estima una caída del 7% y a la de Moody’s, de 3.7%.
Urgente, medidas drásticas de aislamiento
El documento emitido por BBVA alerta que el país se encuentra en un momento en el que se deben de tomar decisiones rápidamente, pero alertando del impacto drástico de las medidas establecidas. También urge disposiciones drásticas de aislamiento de personas, al considerarlas absolutamente necesarias.
«Entre más fuertes, rápidas y contundentes sean las medidas (que pueden llegar hasta un encierro nacional), menor será la expansión del virus, y por tanto, menores los impactos económicos en el mediano plazo», suscribe el informe.
Asimismo, BBVA Research pone énfasis en que se requerirán, como nunca antes, medidas económicas para mitigar el impacto económico de la pandemia en las personas, priorizando a las más desfavorecidas. Indica que la afectación a al actividad económica global sea mayor a la que se registró en la crisis financiera internacional en 2008-2009.
Esta postura coincide con anunciada por la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, quien aseveró que la situación por la que atraviesa el mundo es igual o peor a la de hace doce años.
Es por lo anterior, que BBVA Research destaca que “si las agresivas medidas de contención se toman rápido, la probabilidad de que los ineludibles efectos económicos duren relativamente poco (posiblemente uno o dos trimestres) aumentarán”.
Cancelación de planta cervecera, pésima señal en el momento menos adecuado
De igual manera, el documento anticipa una caída pronunciada en la producción manufacturera en México por el desplome de la demanda en Estados Unidos, sumado a las disrupciones en las cadenas de valor por el «cierre» económico en muchas regiones del mundo. También prevé una interrupción en el sector de la construcción y una afectación en el corto plazo al sector servicios.
Por otra parte, BBVA Research advierte de una previsible caída significativa en la inversión por una incertidumbre sin precedentes. A esta afectación se le suma la cancelación de la planta cervecera de Constellation Brands en Mexicali, aún cuando llevaba más de la mitad del avance, tras una consulta popular:
«La consulta, en la que solamente participó un 3% de la población no es un ejercicio democrático y es una muy mala decisión económica que tendrá efectos similares en la confianza a la cancelación del aeropuerto de Texcoco. La señal que se manda es que no hay certidumbre jurídica y que se pueden cambiar las reglas ya muy empezado el partido», refiere el análisis.
Asimismo, anticipa un alto al consumo derivado del cierre económico temporal y lenta recuperación por los drásticos efectos sobre las finanzas de las familias, que se verán golpeadas por la pérdida de empleos (sector formal) e ingresos (sector informal), la acumulación de deudas y el esperado desplome en las remesas.
Banxico debe modificar postura
De igual manera, la investigación apela a una postura monetaria por parte de BANXICO acorde a las circunstancias actuales. Apunta que la postura mantenida por el banco central del país sigue siendo altamente restrictiva a pesar de la bajada de 50pb en la tasa monetaria a 6.5% y describe la política monetaria como “una de las peor posicionadas en el mundo para contrarrestar los efectos negativos sobre las economías y las personas”.
En este sentido, exhorta a flexibilizar lo más posible la postura y ajustar rápidamente la tasa monetaria. “En nuestra opinión, la reciente bajada debió de haber sido de 100 puntos básicos y darse fuera de calendario, no en sustitución de la reunión ya planeada”.
Prioritarias, medidas fiscales que favorezcan a población vulnerable
Asimismo, BBVA Research sugiere la adopción de medidas fiscales como transferencias de efectivo a personas que han perdido su empleo como aquellas que dependen de su ingreso diario para vivir. Menciona que son necesarios estímulos fiscales a empresas, priorizando a las mipymes y las de los sectores más afectados.
«Los estímulos debieran ser en la forma de créditos, posposición del pago de algunos impuestos y no transferencias directas». En el caso de las grandes empresas, señala que los apoyos deberían ir dirigidos condicionados a que se utilicen para no despedir empleados y mantener viva la empresa y no a otros objetivos.
También recomienda la reasignación de partidas presupuestales encaminadas a proyectos de inversión no rentables (refinería Dos Bocas, Tren Maya, aeropuerto de Santa Lucía» para la adquisición de materiales y provisión de servicios médicos adecuados a las necesidades de atención hospitalaria derivadas de pacientes con COVID-19.
“La fragilidad económica y social quedará en evidencia como nunca antes. Se debe aprovechar esta coyuntura para finalmente sentar las bases para una sociedad en la que la mayoría pueda aspirar a vivir en condiciones dignas”, cierra el documento.