Tímidos avances en un sector que define la competitividad de los estados
A pesar del potencial industrial que genera el sector automotriz en la ciudad, Aguascalientes no sobresale en materia de innovación y tecnología. De hecho, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Aguascalientes no se encuentra ni siquiera entre los diez estados con mejor desempeño en innovación y patentes, uno de los elementos principales de la competitividad de una sociedad, de acuerdo con lo establecido por los indicadores del Índice de Competitividad Urbana 2016.
Dicho índice tiene como objetivo principal medir la capacidad de las ciudades del país para atraer y retener talento e inversiones conforme a la productividad y bienestar de sus habitantes. En él, Aguascalientes registró números positivos en la mayoría de los rubros, estableciéndose en el octavo lugar nacional como región más competente. Sin embargo, en cuestión de dos años, la entidad descendió dos posiciones, quedando por debajo del Valle de México, San Luis Potosí, Campeche, Querétaro, Monterrey, Saltillo y Hermosillo.
Tecnología e innovación, el talón de Aquiles nacional
Según el Índice de Competitividad Global, el cual establece el promedio de desarrollo que los países pueden alcanzar, México se encuentra en la posición 57 de 140 naciones participantes. Aspectos como la fortaleza en las instituciones, infraestructura, educación, entre otros, determinan el potencial de cada país en el contexto global.
La innovación y tecnología, de acuerdo con estas estadísticas, son de los puntos más carentes de desarrollo en México. En capacitación tecnológica, que es el pilar número 9 del Índice de Competitividad Global, la república mexicana se ubica en la posición 73; mientras que en innovación, pilar número 12, en el lugar 59.
Dentro de estas evaluaciones, se presentan distintos subíndices que analizan la competitividad de cada estado en algún país en específico. En el caso de Aguascalientes, los rubros de medio ambiente, derecho y gobierno son los mayormente fortalecidos. En ellos, la entidad se encuentra entre los cuatro primeros lugares a nivel nacional; sin embargo, en innovación y tecnología, se coloca en el puesto once.
La baja proyección en la innovación, así como la falta de experiencia por parte del sector académico en dicha materia, se pueden ver reflejados en otro de los puntos de análisis: sociedad. Este eje involucra la calidad de vida de los habitantes tomando en cuenta indicadores como el nivel académico, oferta médica, servicios de salud y condiciones socioeconómicas. En él, el estado se encuentra en la posición 29.
Educación superior, la alternativa más viable
La perspectiva sobre innovación en las aulas universitarias resulta de lo más optimista. En el caso de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, su Departamento de Vinculación fue establecido hace menos de cinco años, por lo que la experiencia a nivel departamental es aún joven. No obstante, la estrategia de la institución parte de un proyecto a largo plazo: el Plan de desarrollo 2017-2024.
En este plan, la UAA optaría por analizar las áreas de oportunidad que se tienen a nivel institucional en un marco comparativo con otras universidades nacionales e internacionales. Esto, desarrollando cuatro puntos clave: investigación, gestión, vinculación y docencia.
Marisol Cervantes Martínez, jefa del departamento de vinculación UAA, presentó a Líder Empresarial los proyectos universitarios actuales en materia de innovación. Apuntó que se “ha realizado oferta con el ramo productivo y de innovación para generar soluciones a lo que el mercado exige”. Además de que “la colaboración con el sector de investigación, así como con centros de ciencias e ingenierías, ha derivado en óptimos resultados”.
Con la mira en el sector agrícola y la inclusión académica
Para la UAA, 2016 fue un año importante en cuanto a investigación, debido al estudio Análisis de Brechas Tecnológicas, que se enfoca en analizar el mercado actual en diversos ámbitos para así establecer soluciones en cada uno de ellos. En la primera fase de este proyecto, se estableció relación con problemáticas de la industria apícola, el sector hídrico, agropecuario y de energías renovables.
Los resultados del análisis serán publicados en 2017 con el fin de proyectar soluciones destinadas a los representantes de cámaras empresariales e industriales como Canacintra, Coparmex, entre otras. La relación entre este tipo de organismos y la universidad “se ha construido por medio del Programa Estímulo a la Innovación (PEI) del Conacyt, en donde la UAA ha participado con alta demanda en áreas como diseño industrial, electrónica y diseño de software”, señala Cervantes.
En el PEI, el sector empresarial solicita soluciones en innovación y transferencia de tecnología; y, explica Cervantes, “el departamento de química de la UAA ya ha desarrollado prototipos funcionales que trabajan con empresas locales y nacionales”.
La educación es otra de las prioridades de la universidad de cara a 2017, principalmente en el tema de inclusión. Por ello, estima implementar un sistema académico adaptado a niños con discapacidades, mediante un modelo de negocios que emplea manuales de lenguajes y señas, así como teclados especiales que optimicen el aprendizaje.
La perspectiva de los centros de investigación
Fernando García, gerente de operación del Centro de Investigación y Desarrollo aplicado en Aguascalientes, explica que “la innovación no ha sido un tema sencillo”, ya que se necesita de una constante “labor de búsqueda” para encontrar proyectos de esta índole.
Además, detalla que tan solo el PEI es uno de los programas de innovación más conocidos a nivel nacional; pero se requiere de “mayor promoción a otros eventos”. Este centro de investigación surgió en 2009 por parte de la empresa Tecnomec Agrícola y su proyecto reciente involucra el desarrollo de una planta productora de biogás por medio de nopal.
Ante el potencial del desarrollo agrícola a nivel local, García manifiesta que una de las principales trabas para lograr un óptimo proceso de innovación en este ramo es la ideología de sus representantes, quienes “no han recibido con tan buena aceptación los nuevos procesos productivos”. “Es necesario que los miembros de la industria alimentaria se convenzan de cambiar las prácticas antes, para mejorarlas mediante nuevas tecnologías”.
“El estudiante hidrocálido requiere romper con la idea de que el ámbito automotriz es el único mercado”
¿Qué hace falta en las universidades?
De acuerdo con Fernando García, el estudiante hidrocálido requiere mayor conocimiento de herramientas tecnológicas en diseño para la industria, así como “mentalmente, romper con la idea de que el ámbito automotriz es el único mercado”; esto, añade, “para diversificar más la visión, pues el sector agrícola puede resultar un excelente área a trabajar en innovación y proyectos tecnológicos”.
Por su parte, Eduardo Contreras, representante del Consejo de Vinculación de Educación Superior en Aguascalientes (COVESA), considera que “los estudiantes requieren de materias con más conceptos de innovación para construir la mentalidad de que siempre habrá algo por mejorar, pues el innovar involucra todo un proceso, no solo las ideas”. A esto, agrega que “la parte que nos corresponde a los profesores es contar con experiencia en este campo”.
En plática con Líder Empresarial, Contreras comenta que existen tres puntos clave que han limitado el desarrollo de la entidad en cuanto a innovación. “La falta de información en las empresas sobre proyectos de este carácter ha sido una traba importante, la cual se trabajó a medias durante el anterior gobierno; por eso, surge la expectativa de que se continúe durante este nuevo mandato”.
“El escaso financiamiento por parte del estado” es otra de las principales preocupaciones; además de que “existe la necesidad de una mayor flexibilidad del gobierno hacia universidades estatales”; esto, en el desarrollo de nuevos proyectos, pues “se han detectado candados que nos impiden participar de la forma en que quisiéramos, principalmente en la distribución de tiempos por parte de los profesores”, expresa el representante de COVESA.
El fortalecimiento de las pymes es una de las áreas de oportunidad más claras, según Contreras. “Las macro empresas vienen y traen consigo todo lo que necesitan en tecnología, por lo cual es poco lo que podemos ofrecerles en procesos de automatización”; sin embargo, sentencia, “las pymes sí necesitan estas asesorías. Ellos no tienen técnicos expertos en robótica u otras materias, es ahí donde debemos de trabajar”.