Los estacionamientos, incluidos los de centros comerciales, están obligados a contar con un seguro contra robo y daños que cubra a todos los automóviles que ingresen como parte de los servicios que ofertan, declaró Patricia Valadez Bustamante, delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Pese a los letreros y mensajes de “No nos hacemos responsables de robos o daños” que colocan dentro de las instalaciones, los propietarios deben proteger a los autos contra robos parciales o totales o daños que pueden ser desde pequeños rayones hasta choques.
“Si estamos pagando un servicio, se tiene que estar dando un servicio de seguridad. Antes de sacar la licencia de municipio, se indica que tiene que tener un seguro o una aseguradora que se haga cargo bajo las situaciones que se puedan dar al interior del estacionamiento”, afirmó la delegada.
En caso de que los usuarios resulten afectados y los estacionamientos no cuenten con seguro, los administradores o propietarios deberán pagar los artículos hurtados de los vehículos, daños o incluso robo de la unidad, apuntó Valadez Bustamante.
Recomendó a los consumidores que tomen fotografías al ticket para responsabilizar al proveedor del servicio.
En lo que va del año, se han recibido 11 denuncias contra estacionamientos, la mayoría porque no contaba con reloj checador, los vehículos presentaban rayones o golpes y por realizar un cobro mayor a la tarifa autorizada por el municipio.
Sólo tres estacionamientos fueron sancionados: por haber hecho un cobro extraordinario, fue penalizado el estacionamiento de Galerías; y por no exhibir el tiempo límite de tolerancia para salir, fueron penados el de Plaza San Marcos y Altaria, este último fue acreedor de una multa por 60 000 pesos y sigue en litigio.