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José Antonio Esquivias Romero, UP Bonaterra

En Aguascalientes y todo el país, el foco del problema de la educación superior está cambiando de la cobertura a la calidad.

Según Conapo, la población objetivo de las universidades (de 18 a 24 años) crecerá casi 6 por ciento en Aguascalientes entre 2013 y 2025, y descenderá progresivamente a partir de entonces.

Para José Antonio Esquivias Romero, rector de la Universidad Panamericana Campus Bonaterra, esto significa que “cualquier institución educativa que quiera llenar sus aulas lo puede hacer, pues hay muchos alumnos disponibles. Pero conforme vaya disminuyendo la matrícula, será necesario que solo las mejores queden en el ambiente universitario”.

Las estadísticas y el entorno laboral apuntan a que, en los próximos años, se demandarán perfiles profesionales especializados y, por lo tanto, posgrados. Sin embargo, las universidades mexicanas presentan una constante negativa: su alto grado de penetración en la sociedad contrasta con sus bajos indicadores de calidad.

“Tenemos que ser analizados efectivamente por organizaciones serias que nos puedan decir cómo nos ve el mundo, a través de agencias acreditadoras que están al pendiente de los rankings”, reconoce el rector de la UP Bonaterra.

Esquivias Romero advierte que las Instituciones de Educación Superior (IES) deben apostar a realizar investigación aplicada, desarrollar posgrados de calidad y fortalecer sus vínculos con el sector productivo. Estos tres ejes, indica, integran un modelo mediante el cual pueden incidir en sectores clave de la sociedad.

“Las empresas necesitan el apoyo de las universidades. Así como ellas nos apoyan desde el punto de vista económico, con sus recursos, necesitan investigadores capaces de resolverles problemas que el día a día no les permite resolver a ellos. Con esa vinculación, esa especie de asociación empresa-universidad, nos podemos enriquecer ambos”, explica.

También plantea que aunque las IES, tanto públicas como privadas, deben encaminarse en esa dirección, las del sector privado tienen mayor posibilidad de liderar el cambio debido al momento que vive México.

“(Las instituciones educativas privadas) no vamos a la cobertura. Eso lo está haciendo en Aguascalientes la universidad pública y lo hace muy bien. Nosotros le tenemos que apostar a la incidencia profunda en ciertos niveles socio académicos, en donde debemos apoyar al estado generando conocimiento y formando gente que incida en la sociedad”.

Independientemente de ello, las IES necesitan procurar a quienes egresan de sus aulas y vuelven a ellas para formarse en posgrados una visión global, que corresponda con el entorno económico en el cual se desenvuelven.

“No se trata solamente de hacer intercambios con otras universidades o del manejo del idioma inglés, sino también de ir creando una mentalidad global en los alumnos, hacerlos capaces de interactuar con estudiantes y directivos de otras latitudes”, aclara.

¿Qué recomienda este rector para elegir universidad? El aspirante debe indagar “qué profesores hay ahí, qué están investigando, en qué están fuertes, en qué están compitiendo a nivel mundial”.

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