La Secretaría de Salud estima que por cada paciente diagnosticado con COVID-19, hay entre siete y ocho personas más infectadas con el virus SARS-CoV-2 que pasan por debajo del radar de vigilancia epidemiológica debido a que no presentan sintomatología de la enfermedad o manifiestan síntomas leves que no derivan en la solicitud de atención médica o la aplicación de una prueba.
“Por ahí hay una estadística que menciona que por cada caso positivo que se diagnostica, hay alrededor de siete a ocho que no diagnosticamos. Creemos que esa pueda ser la población que tenemos infectada”, dijo en rueda de prensa el secretario de Salud, el Dr. Miguel Ángel Piza Jiménez.
Hasta el día de hoy, Aguascalientes tiene registro de 5,109 casos acumulados de COVID-19 desde que se notificó el primer positivo, el domingo 15 de marzo. De acuerdo con las proyecciones, la población que contraído el virus SARS-CoV-2 en la entidad podría alcanzar entre los 35 mil y 40 mil personas.
No obstante, el secretario de Salud prefirió no expresar cifras, aunque señaló que el programa de vigiliancia Centinela ha ayudado a detectar más pacientes asintomáticos con la infección, logrando establecer cercos sanitarios para evitar la diseminación del virus.
“El Programa Centinela sí sirve para esto [detección de asintomáticos], porque al implementarse muestreamos hasta gente que no manifestó ningún síntoma; hicimos un rastreo general y encontramos personas que no mostraba signos pero se habían infectado”, refirió.
“Afortunadamente estos pacientes son asintomáticos, por lo que esa gran cantidad que no detectamos no necesitan hospitalización”, agregó.
Cabe señalar que Aguascalientes es la cuarta entidad que mayor número de pruebas realiza a nivel nacional por cada 100 mil habitantes, con 1,283 tests aplicados, de acuerdo con la Secretaría de Salud.
Actualmente, la tasa de letalidad en la entidad por COVID-19 es de 5.2%. Si las estimaciones sobre la cifra real de contagiados en Aguascalientes fuera la correcta (entre 35 mil y 40 mil infectados), esto reduciría el índice de fatalidad a entre 0.6 y 0.7% .
Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los Estados Unidos, estima que la tasa de letalidad del nuevo coronavirus estará por debajo del 1% una vez que se sepa con claridad la cantidad de casos asintomáticos y leves de COVID-19 que los sistemas de salud no contabilizaron inicialmente.
Las experiencias en el subregistro de otros países
En varias partes del mundo se ha reconocido la dificultad de identificar a la totalidad de los portadores del patógeno. Tom Frieden, director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos en la administración de Barack Obama, señaló que el sistema sanitario estadounidense solo detecta 1 de cada 10 casos de COVID-19.
Un estudio de seroprevalencia en Nueva York a inicios de mayo, detectó que el 12.3% de la población, es decir, alrededor de 2.3 millones de personas, mostraron tener anticuerpos contra el Sars-Cov-2, cifra significativamente superior a los 312 mil contagios acumulados que el sistema de salud tenía registrados oficialmente a través de pruebas PCR.
En España, uno de los países mayormente afectados por la pandemia, un estudio de seroprevalencia publicado el 4 de junio halló que el 5.2% de su población había padecido COVID-19, es decir, alrededor de 2.4 millones de españoles, cifra 10 veces mayor a la registrada por el Ministerio de Sanidad (240 mil casos).
Incierto, papel de presintomáticos en la propagación
Cabe señalar que aún incierto el papel que juegan los pacientes asintomáticos en la propagación del virus, Semanas atrás, la especialista en Enfermedades Emergentes de la Organización Mundial de la Salud, María Van Kherkove, señaló que la capacidad de infectar de estas personas es menor debido a que su carga viral es inferior.a la de los pacientes sintomáticos.
No obstante, la autoridad sanitaria ha insistido en saber saber diferenciar entre pacientes asintomáticos y presintomáticos. Los primeros nunca reflejan algún signo de la infección; mientras que en los segundos, son personas que originalmente no lucen ni se sienten enfermas, pero eventualmente reflejarán algún síntoma.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, el periodo de incubación para el SARS-CoV-2, es decir, el tiempo transcurrido entre la infección y el comienzo de síntomas, oscila entre los 2 y 14 días después de la exposición.