El más reciente Reporte de Economías Regionales del Banco de México reveló que durante marzo de 2025, el 21.9% de los empresarios del noreste mexicano expresó una mayor inquietud por las condiciones económicas externas que por las políticas del gobierno nacional.
Este porcentaje representa un incremento de 4.2 puntos en comparación con marzo de 2024, cuando solo el 17.7% de los empresarios compartía esa percepción.
¿Cómo afecta la guerra comercial a los estados del norte?
Los empresarios de Nuevo León, incluyendo otros estados del norte como Baja California, Chihuahua, Coahuila, Sonora y Tamaulipas lideran esta creciente preocupación externa.
Coparmex Nuevo León, a través de su directora Cecilia Carrillo López, atribuyó esta percepción a los nuevos aranceles estadounidenses sobre automóviles, acero y aluminio.
Carrillo advirtió que estas medidas afectan directamente a los estados más orientados a la exportación, convirtiéndolos en los más vulnerables. Por esta razón, urgió a los tres niveles de gobierno a fortalecer el mercado interno y a fomentar la inversión nacional, con el fin de mitigar posibles impactos negativos.
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Inflación como el mayor desafío
Además, Coparmex destacó que aunque las preocupaciones externas han aumentado, la inflación sigue encabezando la lista de desafíos para los empresarios del noreste. En marzo de 2025, el 31.7% de los encuestados la señaló como su principal preocupación.
Sin embargo, esta cifra representa una disminución de 4.4 puntos porcentuales respecto al año anterior, lo que sugiere una ligera mejora en las condiciones macroeconómicas internas.
¿Qué impacto tienen las exportaciones en el panorama actual?
Durante el último trimestre de 2024, cinco de los seis estados más preocupados por el entorno global también se destacaron como los mayores exportadores del país: Chihuahua, Coahuila, Baja California, Nuevo León y Tamaulipas.
A manera de ejemplo, la Industria Nacional de Autopartes advirtió esta semana que, si Estados Unidos dejara de importar vehículos desde México y Canadá, necesitaría construir al menos 18 nuevas plantas y destinar más de 50 mil millones de dólares para mantener su nivel actual de producción.
Frente a este panorama, Coparmex insistió en la necesidad de acciones gubernamentales proactivas que fortalezcan la economía nacional desde adentro. Incentivar el consumo, apoyar a las pequeñas y medianas empresas, y desarrollar políticas industriales adaptadas al nearshoring podrían ser claves para fortalecer la resiliencia del norte de México.
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