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Emplea el counselling empresarial para vencer la incertidumbre

Por Xicoténcatl Morales Hurtado, CEO SELF México

La incertidumbre es común en esta “nueva normalidad” y puede estar afectándonos más de lo que pensamos. Es importante blindar nuestra persona ante toda información falsa o mensaje nocivo que pretenda distraernos de nuestros objetivos comerciales.

Entender el significado de la crisis provocada por la contingencia sanitaria y prepararnos para entrar a una nueva temporada es crucial, sobre todo porque dicha etapa está marcada por insólitos elementos que han reconfigurado algunos temas de la iniciativa privada.

Una forma de adaptarnos a los matices que ha dejado la pandemia puede ser considerar lo que nos dice el counselling empresarial

¿Qué es el counselling?

El counselling es una herramienta de crecimiento personal que nos permite atender los múltiples factores que participan en la construcción de una personalidad asertiva. Para un dueño de negocio o titular de una firma mercantil es vital que cuente con un registro continuo de sus esquemas mentales, convicciones, capacidades y temores.

Si cuenta con un asesor personal que le está ayudando a dar significado a los procesos mencionados llevándolos al terreno del crecimiento, la autoafirmación y el liderazgo, es muy probable que ya esté insertado en un proceso de counselling.  

Esta herramienta también suele definirse como un tipo de relación de ayuda y acompañamiento que permite al cliente clarificar los elementos de la realidad y desarrollar autocontrol ante la misma, favoreciendo con ello la toma de decisiones.

Coaching o Counselling: ¿qué me conviene?

La verdad es que la línea es muy corta y tenue para distinguir a ciencia cierta entre coaching y counselling. Los expertos opinan que mientras que el coaching se centra en el objetivo, el counselling en la persona. 

Esto último es así porque el counselling se identifica como una metodología que nos enseña a reflexionar y actuar desarrollando resiliencia, autoconocimiento, gestión emocional y construcción de un sentido de vida.

Según Jesús Rodríguez, presidente de la Federación Internacional de Coaching (ICF, por sus siglas en inglés) con sede en España: “el coaching se orienta a la solución, mientras que el counselling se dirige a la problemática y la forma en que está siendo asimilada por la persona, comenzando desde un estadio anterior”.

Counselling empresarial

Hemos tomado como referencia el counselling ya que entre sus principales atributos está el hecho de sugerir que toda persona que encara una situación de caos o encrucijada necesita clarificar los procesos y recursos personales que ha capitalizado en su vida para encontrar la solución más factible a un problema presente.

El valor del counselling dentro de un panorama corporativo estriba en los dos grandes pilares a los que apunta: adquirir confianza y aprender a ser uno mismo en escenarios diversos y desafiantes.

Sus aportaciones al mundo de los negocios se han dado desde que Colin Feltham, un reconocido business counsellor (consejero empresarial), reconocía hace décadas que la práctica del counselling permite ayudar a la gente a descubrir mejores maneras de afrontar los problemas, analizando la forma en que éstos se retroalimentan entre sí cuando no los atendemos oportunamente.

Elementos que nos clarifica el counselling

Algunas ideas que podemos resumir sucintamente hoy nos vienen como anillo al dedo:

a) Los problemas en la vida necesitan nuestra intervención. La participación activa del sujeto siempre será mejor a la indiferencia o desidia (en su forma de apatía o indolencia).

b) Sólo tenemos una vida y experimentamos la mejor versión de ella cuando nos desprendemos de las excusas para no vivirla intensamente.

c) El bienestar integral de las personas no está asegurado jamás, así que lo mejor es atender los riesgos latentes que afectan al individuo antes de que éstos se muden a otras esferas: familia, profesión, trabajo, etcétera.

A ejecutivos de alta dirección, emprendedores y decisores de empresa en general es importante recordarles que la incertidumbre que rodea la vida de los negocios, acentuada en este tiempo por el impacto del coronavirus, guarda una relación familiar con las capacidades gerenciales adquiridas a través de los años. En otras palabras: a mayor liderazgo y triunfos, mayores pruebas y combates.

La recompensa en el mundo de los negocios no siempre se encuentra en el destino de una buena venta o en la satisfacción que dejan las utilidades, sino en el aprendizaje adquirido o el desarrollo mismo de un líder que ha aprendido a verse como una persona exitosa en medio de pérdidas temporales o tragedias propias de su entorno.

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