Las elecciones de jueces y magistrados va. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) vivió un intenso debate al analizar el proyecto del ministro Luis González Alcántara Carrancá, que proponía invalidar parcialmente la reforma al Poder Judicial de la Federación.
El proyecto de González Alcántara buscaba revertir cambios clave, como la elección por voto popular de jueces y magistrados de Circuito, la remoción masiva de jueces y magistrados, el recorte salarial para los funcionarios judiciales en funciones, la inatacabilidad de sentencias emitidas por el Tribunal de Disciplina, y el nuevo régimen aplicable a los Poderes Judiciales Locales. También pretendía anular la prohibición de suspender normas generales en juicio de amparo.
Un proyecto de González Alcántara
El proyecto de González Alcántara Carrancá proponía limitar las reformas más polémicas en la estructura judicial. Por ejemplo, la idea de una elección popular para jueces y magistrados, un cambio sin precedentes que, según algunos críticos, pone en riesgo la autonomía judicial.
La remoción masiva de jueces y el recorte salarial también figuraban en la lista de medidas que el proyecto buscaba invalidar, argumentando que tales disposiciones afectarían la estabilidad y profesionalismo en el Poder Judicial. Además, cuestionaba la inatacabilidad de las sentencias del Tribunal de Disciplina y el nuevo régimen aplicable a los poderes judiciales de los estados.
A pesar de los intentos de invalidación, el proyecto avalaba algunas medidas de la reforma, como las iniciativas de austeridad para futuros cargos, la extinción de fideicomisos destinados al Poder Judicial, y la creación de un Tribunal de Disciplina y un Órgano de Administración. También respaldaba la implementación de plazos para la resolución de sentencias y la elección popular de ministros de la SCJN, magistrados del Tribunal de Disciplina y magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral, permitiendo así la participación ciudadana en el proceso de selección de autoridades judiciales.
Votación decisiva en la Corte
Para aprobar el proyecto, la SCJN requería una mayoría calificada de 8 votos, pero el apoyo solo alcanzó 6. La postura del ministro Alberto Pérez Dayán fue decisiva para desechar el proyecto, ya que su voto era crucial para lograr la mayoría. Pérez Dayán argumentó que la acción de inconstitucionalidad era improcedente y defendió la legalidad de las reformas aprobadas por el Poder Legislativo.
Posturas firmes de los Ministros
Durante la discusión, la ministra presidenta Norma Lucía Piña subrayó que
«ningún consenso, por más amplio que sea, está facultado para pasar por encima de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos«.
Piña defendió los principios fundamentales que definen a México como una República representativa, democrática y federal, sustentada en la división de poderes y la protección de derechos humanos.
La ministra Margarita Ríos Farjat también expresó su oposición al proyecto, afirmando:
“El Constituyente dotó a cada poder de autonomía. Autonomía es la capacidad de decidir por sí mismo los asuntos que le atañen directamente, como el perfil de sus funcionarios. Esto es parte del legado del Constituyente”.
Para Ríos Farjat, mantener la autonomía del Poder Judicial resulta esencial para el equilibrio de poderes en México.
Por su parte, la ministra Loretta Ortiz señaló que la SCJN tiene el deber de interpretar conjuntamente la norma constitucional y las normas internacionales. Además, reafirmó que el tribunal no tiene la facultad de inaplicar la Constitución, manifestando su compromiso de actuar conforme a los límites legales establecidos.
Un debate sobre la Autonomía y el futuro del Poder Judicial
La decisión refleja el compromiso de la SCJN con la Constitución y con la defensa de los principios que sustentan la estructura democrática de México. Este debate en la SCJN pone de relieve las tensiones entre la autonomía del Poder Judicial y las reformas impulsadas por el Poder Legislativo.