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El Síndrome de la Torre de Babel en tu empresa

Por Katia Hahn R. Coach personal. Directora/Fundadora de Expertise Group.

Se cuenta en la biblia católica, que tras el diluvio universal el hombre creó una torre enorme. Parte de sus motivos era salvaguardarse por si llegaba otro diluvio y por supuesto estar más cerca de Dios. Sin embargo, para que la tierra fuera poblada se dice que Dios hizo que todos sus habitantes hablaran lenguas diferentes y no se pudieran entender. Me gustaría que nos enfocáramos en el detalle más importante de esta narración: La Comunicación.  

La variación de códigos y símbolos (lenguaje y percepciones) dentro de las comunicaciones puede hacer casi imposible de comunicarse que los puestos de liderazgo resultando en falta de arribo a las metas y objetivos, alta rotación de personal y finalmente en una baja productividad y la sensación de dificultad para avanzar en general. Entonces, ¿cómo evito el síndrome de la torre de Babel en mi empresa? Aquí te damos algunas herramientas: 

1.- La barrera del Ego: “Sólo hay una manera correcta de hacer las cosas, la mía”. 

• Creemos que lo que comunicamos es tan claro para los demás como lo es para nosotros. 

• Creemos que todos damos el mismo significado a las palabras. 

• Creemos que la manera en que percibimos las situaciones es igual a como la perciben los demás. 

• Creemos que estamos en lo correcto y los demás están equivocados. 

2.- Asegúrate que la conversación o mensaje pase 3 filtros: 

¿Es importante para ti? 

¿Es importante para mi? 

¿Es importante para la organización? 

Esta es la única manera que SUMARÁ PARA TODOS. 

3.- Empatiza y Verifica conversaciones 

Retro-Rastreo: (Utiliza las mismas palabras y emoción) 

“Lo que tu dices es…..” 

Parafraseo (Resume la conversación que acabas de tener) 

“Lo que entiendo que me quieres transmitir es…” 

Haz preguntas… (No hay pregunta tonta) 

4.- Haz un compromiso de escucha activa: Apaga tus conversaciones y prisa interna para estar aquí y ahora. 

✓ Voltea y haz contacto Visual. ✓ Pon atención más allá de las palabras. Percibe su lenguaje corporal. ✓ Sé empático. ✓ Demuestra interés en la conversación. ✓ Busca el tiempo y espacio correctos para escuchar. 

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