Es imposible hablar de la industria automotriz aguascalentense sin mencionar a Nissan. Por más de 36 años, la compañía japonesa ha sido un referente de la economía local por su generación de más de 40,000 empleos, entre trabajadores internos y proveedores, así como por su inversión de 2,000 millones de dólares sólo en su planta A2.
Bajo el liderazgo de Armando Ávila Moreno, vicepresidente de Manufactura de Nissan Mexicana, la firma japonesa ha creado un ecosistema industrial en el que cada vez más compañías extranjeras se suman y más negocios locales crecen; una red que al día de hoy equivale a más de 200 empresas beneficiadas por el efecto Nissan.
La llegada de este gigante a la entidad se dio en 1982, cuando instaló su planta de fabricación de motores. Diez años más tarde inició operaciones su Planta A1, que por primera vez en la historia concedió a un estado con pocos habitantes la oportunidad de convertirse en fabricante de autos.
A finales de los 90, la compañía se sobrepuso a una crisis de la mano con Renault. Ambas firmas establecieron una alianza con el objetivo de liderar el mercado automotor e incrementar su presencia en distintas partes del mundo. Aguascalientes no quedaría exento de esta proyección, ya que Nissan apostó por convertir al estado en un punto estratégico a nivel continental.
La apertura de la planta A2 fue un parteaguas para posicionarse en el mundo, gracias a un espacio de 460 hectáreas en el que aloja innovación y desarrollo tecnológico con alcance global. Esta factoría le permitió expandirse a más de 100 países en los continentes de América, Europa y Asia en la fabricación no sólo de vehículos, sino también de componentes y tecnología.
El nivel de productividad de la planta A1 también tuvo que ver con ese crecimiento. Esta sede es considerada como la más rápida para el corporativo global por tener un promedio de ensamble de 65 unidades cada hora; en conjunto, ambas fábricas aguascalentenses pueden alcanzar una velocidad de ensamble de 36 segundos por unidad, lo cual representa 100 vehículos producidos por hora.
Manufactura sostenible
La producción de Nissan en Aguascalientes está acompañada de las mejores prácticas en materia ambiental. Por décima ocasión consecutiva, obtuvo el refrendo de su certificado Industria Limpia en su planta A1 y su segundo refrendo para la planta A2. Esta distinción es otorgada por la Semarnat y la Profepa a las compañías con un óptimo desempeño ambiental.
La planta A1 utiliza biogás y energía eólica en sus procesos, con lo que ha reducido la emisión de más de 380,000 toneladas de CO2 a la atmósfera, ya que el 57 por ciento de su energía está libre de este contaminante. Algunos de los vehículos producidos con energías limpias son Kicks, Versa, Sentra y March.
Tendencias hechas en Aguascalientes
Nissan Mexicana busca atender las principales demandas de la movilidad del futuro con vehículos adaptados a las últimas tendencias de la innovación. Modelos como la versión de lujo del Versa y del Sentra tienen integradas plataformas de conectividad, tecnología de manejo autónomo, sistemas cero emisiones, entre otros adelantos.
Representantes de la compañía destacan que esta nueva etapa ha incentivado la especialización del talento local hacia las necesidades que exige la producción de modelos con mayor tecnología. No descartan incorporar en un futuro no muy lejano nuevas líneas de vehículos híbridos y eléctricos, aunque consideran que la infraestructura es un reto importante para traer esas unidades al país.
Hace cuatro años, la empresa generó una alianza con BMW Group México para crear la red “ChargeNow”, la cual busca crear condiciones para promover la movilidad eléctrica con 500 estaciones de carga instaladas en distintas partes del país. Esta iniciativa representa una inversión de más de 100 millones de pesos.
A nivel global, Nissan está desarrollando nuevas tecnologías para mejorar la movilidad inteligente. Recientemente, presentó su sistema de asistencia ProPilot, el cual debutará en el Nissan Skyline en el mercado japonés en otoño del 2019. Esta plataforma combina la conducción en carretera y capacidades de manejo sin manos en un solo carril.