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El gran reto para la nueva legislatura de la cámara de diputados

Uno de los retos más importantes para los nuevos diputados federales será el análisis y aprobación del presupuesto de egresos de la federación para el ejercicio de 2016, mismo que según el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray deberá hacerse bajo un esquema de Presupuesto base cero.

Es un hecho que con la caída de los precios del petróleo, el Gobierno Federal obtendrá menores ingresos para el año de 2016, por lo que será necesario hacer ajustes al gasto público con la finalidad de hacer más eficiente el uso de los recursos públicos. Recordemos que el 30 de enero de 2015, el Gobierno Federal anunció un recorte al presupuesto de egresos del 2015 por 124 mil millones de pesos; asimismo, para 2016 se está previendo un ajuste adicional por 135 mil millones de pesos, por lo que es necesaria una verdadera reingeniería en el presupuesto de egresos de la federación para el próximo año, en donde todos los gastos de los gobiernos sean administrados con eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez, para satisfacer los objetivos a los que están destinados.

Se necesita tener al gasto público en disciplina, que disminuya el que no es productivo como el gasto corriente, privilegios, sueldos y salarios de burócratas, despilfarro y gastos innecesarios de muchas dependencias gubernamentales, incluyendo al Instituto Nacional Electoral, los partidos políticos, los gastos de campañas políticas, excesos de la clase política en las cámaras, para que sean redistribuidos a programas que impulsen la capacidad productiva, salud, educación, programas para adultos mayores etc.

El pasado 31 de marzo, la Secretaría de Hacienda presentó a la Cámara de Diputados (Cámara que tiene la facultad exclusiva para aprobar el presupuesto de egresos de la federación de acuerdo a nuestra constitución) los pre-criterios económicos que se considerarán para el ejercicio fiscal de 2016, en dicho documento se explica que el Gobierno Federal revisará cada uno de los 889 programas presupuestarios, además de los rubros específicos del presupuesto, asimismo, la Secretaría de Hacienda confirmó la decisión de mantener una política de no aumentar impuestos y de no recurrir a mayor endeudamiento ante la caída de los ingresos petroleros, aunque creo que esta confirmación ya es demasiado tarde, ya que en el 2014 y 2015, es decir, en tan sólo 2 años el gobierno mexicano se ha endeudado por más de 1.3 billones de pesos, lo que equivale a un incremento de más del 27% del saldo que se tenía de deuda al 31 de diciembre de 2012, obviamente no considerando la deuda adquirida por PEMEX y CFE en esos años, situación que llevaría a un incremento cercano de la deuda del 35%.

¿Qué debemos esperar los mexicanos con ese presupuesto base cero? ¿Qué es? y ¿Cómo se determina? Conforme a un trabajo realizado por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la H. Cámara de Diputados, a través de la Dirección de Estudios del Presupuesto y Gasto Público, se mencionó que el presupuesto base cero, consiste en revaluar cada uno de los programas y gastos, partiendo siempre de cero, es decir, se elabora como si fuera el primer gasto en que incurriera un gobierno y se evalúa y justifica el monto y necesidad del mismo. Se olvida del pasado para planear con plena conciencia el futuro, es decir, es el proceso de realizar un presupuesto basado únicamente en las expectativas para el año siguiente, sin referencias a los años anteriores, sin base de datos históricos; Cuando los gobiernos están gastando más de lo necesario o desmesuradamente, se elabora el presupuesto base cero, para reorientar los recursos con mayor efectividad.

Además en dicho documento se menciona que el proceso base cero proporciona información detallada sobre el dinero que se necesita para lograr los resultados deseados, enfoca la atención hacia el capital necesario para los programas en lugar de enfocarse hacia el porcentaje de aumento o reducción del año anterior, asimismo, el presupuesto base cero también proporciona un medio para poder identificar y evaluar eficazmente las actividades y los problemas correspondientes para poder tomar decisiones y las medidas para resolver los problemas y asignar y aprovechar los recursos en forma eficaz.

Para este 2015 se estimó tener un presupuesto de egresos de la federación por un importe superior a los 4.6 billones de pesos, por lo que es necesario preguntarnos si el Gobierno Federal será capaz de hacer una reingeniería y análisis a detalle de cada uno de los rubros que componen dicho presupuesto.

Les muestro en las siguientes tablas el resumen del gasto autorizado para el 2015 de cada sector de gobierno y de diversos organismos, mismas que servirán a la sociedad para comparar cuál fue la eficiencia que se determinó para el 2016.

Hoy en día la participación de los ciudadanos será una pieza clave para vigilar el correcto destino de los gastos públicos, además de garantizar la objetividad y claridad de la asignación de todo recurso público, por lo que los invito a que se interesen en el análisis de los programas presupuestarios, participando en los diversos foros que para tal efecto se lleven a cabo.

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