La Organización Mundial de la Salud (OMS) se apresuró a reunirse ayer a poner nombre a esta nueva amenaza, ómicron, y la ha calificado de variante de preocupación porque podría conllevar un «mayor riesgo de reinfección», según las primeras evidencias científicas preliminares.
Desde el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), Andrea Ammon, explica en un comunicado que «todavía existe una considerable incertidumbre relacionada con la transmisibilidad, la eficacia de la vacuna, el riesgo de reinfecciones y otras propiedades de esta variante». Al tiempo que ha insistido en que «es imperativo que cerremos la brecha de inmunización.
Se deben considerar dosis de refuerzo para todas las personas adultas, dando prioridad a las personas mayores de 40 años. Finalmente, debido a las incertidumbres involucradas en esta situación, la implementación reforzada oportuna de intervenciones no farmacéuticas es ahora más importante que nunca «.
La variante ómicron del coronavirus, que ha desatado la alerta mundial, se detectó en un país, Sudáfrica, donde la tasa de vacunación anticovid es de sólo el 25 %, lo que resalta la urgencia de distribuir mejor dosis para evitar mutaciones peligrosas, alertó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Conocimientos actuales sobre Omicron
Investigadores en Sudáfrica y en todo el mundo están realizando estudios para comprender mejor muchos aspectos de Omicron y continuarán compartiendo los hallazgos de estos estudios a medida que estén disponibles.
- Transmisibilidad: aún no está claro si Omicron es más transmisible (por ejemplo, se transmite más fácilmente de persona a persona) en comparación con otras variantes, incluido Delta. El número de personas que dan positivo ha aumentado en las áreas de Sudáfrica afectadas por esta variante, pero se están realizando estudios epidemiológicos para comprender si se debe a Omicron u otros factores.
- Gravedad de la enfermedad: aún no está claro si la infección con Omicron causa una enfermedad más grave en comparación con las infecciones con otras variantes, incluido Delta. Los datos preliminares sugieren que hay un aumento de las tasas de hospitalización en Sudáfrica, pero esto puede deberse al aumento del número total de personas infectadas, más que al resultado de una infección específica con Omicron. Actualmente no hay información que sugiera que los síntomas asociados con Omicron sean diferentes de los de otras variantes. Las infecciones informadas inicialmente se produjeron entre estudiantes universitarios (personas más jóvenes que tienden a tener una enfermedad más leve), pero comprender el nivel de gravedad de la variante Omicron llevará de días a varias semanas. Todas las variantes de COVID-19, incluida la variante Delta que es dominante en todo el mundo, pueden causar una enfermedad grave o la muerte, en particular para las personas más vulnerables, por lo que la prevención es siempre clave.
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Efectividad de una infección previa por SARS-CoV-2
- La evidencia preliminar sugiere que puede haber un mayor riesgo de reinfección con Omicron (es decir, las personas que previamente han tenido COVID-19 podrían reinfectarse más fácilmente con Omicron), en comparación con otras variantes de preocupación, pero la información es limitada. Más información sobre esto estará disponible en los próximos días y semanas.
Efectividad de las vacunas: la OMS está trabajando con socios técnicos para comprender el impacto potencial de esta variante en nuestras contramedidas existentes, incluidas las vacunas. Las vacunas siguen siendo fundamentales para reducir las enfermedades graves y la muerte, incluso contra el virus circulante dominante, Delta. Las vacunas actuales siguen siendo eficaces contra las enfermedades graves y la muerte.
- Efectividad de las pruebas actuales: Las pruebas de PCR ampliamente utilizadas continúan detectando infección, incluida la infección por Omicron, como también hemos visto con otras variantes. Se están realizando estudios para determinar si hay algún impacto en otros tipos de pruebas, incluidas las pruebas de detección rápida de antígenos.
Eficacia de los tratamientos actuales: los corticosteroides y los bloqueadores del receptor de IL6 seguirán siendo eficaces para el tratamiento de pacientes con COVID-19 grave. Se evaluarán otros tratamientos para ver si siguen siendo tan efectivos dados los cambios en partes del virus en la variante Omicron.