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E-commerce en Latinoamérica: entre los hábitos de consumo y el resguardo

Hasta antes de la pandemia, en Latinoamérica predominaba cierta renuencia a la compras en línea, situación que cambió después de la generalización del resguardo preventivo. Mientras todo el mundo se recluía en casa para asegurar su salud, más perfiles aparecían en páginas y plataformas de compras con servicio a domicilio.

El estigma hacia el e-commerce se atenuó hasta formar parte de los nuevos hábitos de consumo. De ahí que cada vez más establecimientos volcaran sus servicios a esta modalidad. Los años anteriores al 2020 presentaban un crecimiento progresivo del e-commerce, sobre todo para la adquisición de transporte, hospedaje y ropa; sin embargo, con la aceptación que ha adquirido se han integrado insumos cotidianos.

De acuerdo con Kantar, el cambio en los hábitos de consumo estuvo mediado debido a las circunstancias, pues en países como México y Brasil se realizaron compras en altos volúmenes (mayoreo) como previsión para la contingencia. Al hacerlo de esta manera se emularon las fórmulas utilizadas en países como Estados Unidos. 

¿Qué factores influyeron en el impulso del e-commerce?

La proximidad a los establecimientos fue un factor importante a la hora de decidir la modalidad de las compras, pues a mayor cercanía menor necesidad de recurrir a intermediarios. Conforme estas acciones se normalizaron, también se normalizó el que los compradores destinen parte de su ingreso justo para abastecerse de productos para un lapso mayor al acostumbrado. 

Kantar sugiere que el comprador latinoamericano se adapta con facilidad a la nueva forma de coexistir en el hogar, por lo que estas son las 4 tendencias que motivaron al abastecimiento masivo de insumos durante la contingencia sanitaria:

¿Cuáles países recibieron con mayor naturalidad el e-commerce?

Tomando como base las aseveraciones hechas en el apartado anterior, el aumento del e-commerce en un país está relacionado también con el impulso que se le dio en las grandes ciudades, que son las que se inclinaron más hacia las tendencias de compra y venta digital al existir mayor riesgo que en asentamientos de menor tamaño.

¿Qué se esperará del e-commerce en México?

Centrándose en un contexto más próximo, los hábitos durante la contingencia perdurará más allá de su finalización, por lo que los resultados que ha obtenido el e-commerce en México podrían no diferir de los actuales. La adecuación de las empresas a los medios y plataformas de venta digital, se ha logrado aún cuando el consumidor digital tiene otros estándares que el presencial.

Las categorías online preferidas por los usuarios mexicanos son:

Asimismo, a partir de la fase dos de la pandemia,  hubo un aumento del 30% en ventas en sitios de supermercado en línea; el deporte invadió las plataformas con incremento de compras del 14% y la ropa con un 19%.

Al expandir los horizontes del comercio en línea, México podrá adecuar a su realidad formas más “cómodas y próximas” de atender necesidades sin requerir de traslados. Es cuestión de tiempo para que más sectores económicos queden inmersos en dinámicas en las que empresas de todos los tamaños puedan competir en las mismas plataformas.

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