De acuerdo con el más reciente informe del Banco Interamericano de Desarrollo y Bloomberg, “Climascopio 2015”, México se ubicó entre las primeras 10 posiciones a nivel global y la tercera a nivel regional (América Latina) como uno de los países con mejor desempeño en cuanto al clima de inversiones relacionadas con las energías limpias.
A nivel global, China encabeza la lista con una puntuación de 2.29, seguido de Brasil con 2.12 y Chile con 1.97. En contraste, entre los países con los promedios más bajos están Bahamas con 0.48, Venezuela con 0.40 y Surinam con 0.22.
Por su parte, México se ubica en el séptimo puesto con 1.72 puntos.
El Climatoscopio evalúa 4 parámetros clave por país: la capacidad de energías limpias instaladas y los niveles de producción de biocombustibles, la inversión para proyectos de grande y pequeña escala, las empresas que prestan servicios o fabrican equipos para la industria de la energía limpia y las iniciativas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
La evaluación incluye los perfiles de 55 países, de los cuales se analiza su capacidad de atracción de capital para fuentes de energía reducidas en emisiones de carbono, que aporten al desarrollo de una economía verde.
En 2015, Mexico subió una posición respecto a 2014. Su desempeño fue el siguiente:
- Marco propicio: Obtuvo el puesto 32, escalando ocho lugares con respecto a 2014. Sus puntajes para 2015 y 2014 en este parámetro fueron 1.10 y 0.90, respectivamente.
- Inversiones en Energía Limpia y Créditos para Proyectos Relativos al Cambio Climático: Cayó de la posición 6 al lugar 12. En 2015, su puntaje fue de 0.85, mucho menor al 1.12 obtenido en 2014.
- Negocios de Bajas Emisiones de Carbono y Cadenas de Valor de Energía Limpia: En este indicador, México se colocó en la séptima posición, con un puntaje de 3.84.
- Actividades de Gestión de las Emisiones de Gases de Efecto Invernadero: El país ocupó el cuarto puesto con una variación mínima respecto a 2014, pasando de 3.02 a 3.01 puntos.
En 2014, México solamente generó 6 por ciento de su capacidad eléctrica a partir de fuentes renovables, incluyendo biomasa y residuos, geotérmico, pequeñas centrales hidroeléctricas, plantas eólicas y solares.
Siendo el mayor productor de gas natural de América Latina, el país genera electricidad mayormente a partir de éste, que representó alrededor del 60 por ciento de los aproximados 285TWh generados.