José Cuervo Express, de Mundo Cuervo, es una oportunidad para embriagarse con la belleza perenne de Tequila, Jalisco; deleitarse con la riquísima cultura mexicana; viajar al pasado por medio de un tren digno de otra realidad y descubrir los entresijos que envuelven a la bebida emblemática de México: el tequila. Todo esto conforma una experiencia que al final del trayecto, produce un único sentimiento: qué chingón es ser mexicano.
Campo de Agave de José Cuervo
Millares y millares de plantas de agave resguardadas por los cerros que rodean los cultivos, esto es lo que te ofrece el Campo de Agave de José Cuervo, un paisaje único. Ahí observarás una demostración de la jima. Al ser una bebida producida en cantidades industriales, podría parecer que el tequila no precisa de un trabajo propio de artesanos; pero no es así.
Los jimadores son los orfebres que comienzan la elaboración de esta bebida espirituosa al seleccionar con meticulosidad los agaves que están listos para ser cosechados. Utilizando una coa cuyo peso alcanza los ocho kilogramos, los jimadores identifican, cortan y limpian la planta, con el fin de extraer el corazón del agave, la piña, que es llevado posteriormente a la destilería.
“Nos sentimos orgullosos de hacer este trabajo: si hay una fiesta o una reunión, y no hay tequila, pues la cosa no está buena. Aquí lo que queremos es dar a conocer cómo se hace el tequila desde sus inicios, porque muchas personas compran su botella y se la echan muy a gusto; pero no saben todo el trabajo que hay detrás”, dice Ismael Gama, jimador de José Cuervo.
Dentro de la destilería más antigua de Latinoamérica
El recorrido José Cuervo Express continúa con la visita a la Fábrica La Rojeña, la destilería más antigua de Latinoamérica y lugar donde se elabora el tequila. Nuevamente, considerando el enorme volumen de producción del licor, uno esperaría encontrar instalaciones modernísimas; no es así, las instalaciones de la destilería destacan por conservar una arquitectura colonial, propia de un pasado antiguo; un sitio mágico donde pareciera que no transcurre el tiempo. Edificios de colores vivos, muros verdes, calles empedradas, automóviles antiquísimos propiedad de la familia José Cuervo y un aroma fuerte a agave cocido, son sólo algunos de los alicientes sensoriales que enriquecen la experiencia.
En la destilería La Rojeña, conocerás a detalle el proceso de fermentación, cocción y destilación, que concluye con un añejamiento en barricas, lo que le da el sabor tan característico a los tequilas José Cuervo Tradicional o Reserva de la Familia.
La reinvidicación de la cultura mexicana
Al atardecer, en el Foro Cuervo, podrás deleitarte con una presentación artística que conjuga dos elementos fundamentales de la cultura tapatía: el mariachi y la danza folklórica. Durante una hora, el mariachi hará un recorrido por al acervo musical azteca, interpretando canciones de iconos de la cultura popular mexicana como José Alfredo Jiménez, Vicente Fernández o Álvaro Carrillo; piezas a las que el público se une al unísono para crear una atmósfera irrepetible.
Al ambiente se suma la presentación de los integrantes del Ballet Folklórico Mexicanísimo, quienes ataviados con trajes típicos de Jalisco, acompañan la música con bailes que dejan embelesado al público.
José Cuervo Express: la cima de la experiencia
El culmen que el monstruo tequilero ofrece. Subirse al José Cuervo Express permite experimentar una vivencia que únicamente creíamos posible recrear por medio de libros y películas: viajar en un tren digno de otra época.
Con la amplitud de sus espacios, la comodidad de sus asientos y elegantes acabados al interior de los carros, sólo queda regocijarse por un trayecto embellecido por los paisajes agaveros y la imponente caída del sol. El viaje es amenizado con música de mariachi, mientras eres agasajado con tradicionales aperitivos mexicanos y una selecta coctelería hecha a base de tequila. En el tren también podrás disfrutar de una cata de tequila, la cual te hará disfrutar de una manera diferente la bebida espirituosa.
José Cuervo Express permite vivir una experiencia que hará que aprecies de manera distinta el tequila, que desentrañes su proceso de producción con lujo de detalle, que absorbas la cultura conformada alrededor de esta bebida centenaria que se ha erigido como un elemento identitario del país. Todo esto es enriquecido con la unión de diversos elementos como la música, la comida, la arquitectura; todo en medio de un pueblo mágico que permanece ajeno al tiempo.