Por Antonio Martín del Campo
Chairman 02X
Las scaleups son las empresas que han crecido más de 20 por ciento en empleados o en ventas durante los últimos tres años. Esta definición, aceptada a nivel mundial, tiene variantes en nuestro país y particularmente en nuestra región. Según datos de 2015, los negocios con potencial de ser scaleups se encuentran en un punto de inflexión dentro de su etapa de crecimiento (de pequeña a mediana, de mediana a grande) y han logrado incrementar a doble dígito sus ventas y empleos (después de diez trabajadores) en los últimos tres años.
La base para la sustentabilidad de una compañía y su permanencia en el mercado no solo dependen de la creación de valor, sino también de la captura de ese valor para generar riqueza. Por lo tanto, el enfoque de las scaleups consiste en salir de los mercados de bajo valor agregado, los cuales solo se rigen por el precio y están comoditizados por comprender productos o servicios homogéneos, y entrar a mercados de alto valor con una diferenciación clara basada en la innovación.
«…Ser pyme es un estado de ánimo de depresión colectiva; es el fenómeno de Peter Pan: las empresas se niegan a crecer y quieren operar y comportarse como niños»
La política económica marca que la ventaja competitiva entre países no vendrá de la creación de nuevos negocios, sino del escalamiento de los ya existentes. El Banco Mundial estima que las scaleups con un crecimiento de más de 20 por ciento anual generan más empleos, en proporción a su operación, que las grandes compañías. Por ello, es importante que este tipo de organizaciones se mantenga y se multiplique.
En este movimiento, la iniciativa privada tiene un rol fundamental. El fenómeno de la comoditización o commoditization (un producto o servicio que se distinguía por su calidad o beneficios pasa a ser una masa indiferenciada) ha ocasionado que las pymes continúen siendo pymes y no avancen. Es por ello que en 02X creemos que ser pyme es un estado de ánimo de depresión colectiva; es el fenómeno de Peter Pan: las empresas se niegan a crecer y quieren operar y comportarse como niños, como negocios pequeños. Rehúyen constantemente su llegada a la adolescencia o a lo que en el mundo de las scaleups se conoce como “el paso por el desierto”.
Es pues, un interés nacional el apoyar el escalamiento de las compañías para generar una mayor riqueza y empleos de calidad. La prioridad es la creación de una cultura empresarial que combata de frente el fenómeno de Peter Pan, con el fin de enfocarse en el desarrollo de las organizaciones.
Para lograr realizar esto, necesitamos entender que el protagonista de la película son los emprendedores que aspiran a convertirse en empresarios y, posteriormente, en inversionistas que fomenten la creación y el desarrollo de nuevos proyectos. Son ellos la pieza fundamental, y no los organismos de fomento al emprendimiento, el gobierno o los fondos de capital. Por supuesto, en este juego todos colaboramos, pero son los emprendedores quienes harán o no la tarea; al final, está en sus manos el crecimiento del país. En el pasado, este era un tema de responsabilidad social, ahora es de supervivencia económica.